La Fórmula 1 aterriza en Suzuka, en Japón, un circuito donde son muchos los recuerdos que afloran a la piel de los aficionados de la Fórmula 1. Sauber no llega en las mejores condiciones al mítico trazado nipón, logrando pobres resultados en el pasado Gran Premio de Malasia. Aun así, sus miradas están puestas en la temporada próxima por lo que el objetivo del fin de semana es acumular experiencia y poder aprovechar cualquier oportunidad que se muestre el domingo.

Tampoco reina la positividad desde el equipo suizo ya que las características de Suzuka no se adaptan al bólido azul. Aun así, desde la formación se desde hace tiempo en la temporada 2018. Es por ello que buscan lograr el mayor número de kilómetros en esta parte de la temporada actual.

Por parte de los pilotos, sólo Pascal Wehrlein ha puntuado en esta temporada mientras que Marcus Ericsson no ha estrenado su casillero. El alemán se encuentra entusiasmado por regresar a Japón, donde destaca la vitalidad de los aficionados locales: "Después de Malasia llegamos a Japón, estoy entusiasmado por volver allí. Los fans en Suzuka son unos entusiastas reales de las carreras, así que eso hace que correr allí sea incluso más divertido".

Para el otro piloto de Sauber, Marcus Ericsson, Japón le trae buenos recuerdos. El sueco vivió una temporada hace 8 años, por lo que se siente como en casa: "Es una carrera muy especial para mí, ya que viví y corrí allí en 2009. Tengo grandes recuerdos de mi tiempo allí y el ambiente es siempre genial. Siento que estoy en mi segunda casa".

Aunque Sauber es el equipo con menos puntos de esta temporada 2017, 5 por 23 que tiene el McLaren, el penúltimo de la temporada. Los suizos confían en mantenerse en pista y poder sumar una buena actuación. Como ya ha pasado en otras carreras, buscarán la oportunidad en caso de que la carrera se vuelva ‘loca’.