El piloto del Repsol Honda llega a final de temporada como líder del campeonato y gran favorito para coronarse por sexta ser en su carrera deportiva en la última gran cita de esta temporada en Valencia. Con 21 puntos de distancia sobre su rival más directo, Andrea Dovizioso, el español lo tiene todo de cara para ganar el mundial.

De proclamarse campeón, Márquez sumaría su cuarto campeonato de MotoGP en las cinco temporadas que ha disputado hasta el momento. El #93 únicamente ha perdido las opciones a título en el año 2015, probablemente el más complicado hasta entonces, fruto también de la polémica que se generó durante esa temporada, dándole una presión innecesaria al piloto. 

Las cosas han cambiado desde entonces y lo han hecho hacia mejor camino. Marc Márquez sigue sumando unos números impresionantes en su carrera deportiva, con la emoción y la agresividad propia del piloto de Honda. Esta temporada ha sumado un total de seis victorias, que podrían convertirse en siete si firma una muy buena actuación en Cheste. Aunque, lo cierto, es que el de Cervera se verá obligado a usar la cabeza y asegurarse el campeonato que espera poder defender.

Márquez celebra el podio en Montmeló / Foto: Marc González
Márquez celebra el podio en Montmeló / Foto: Marc González

GP de Japón con sabor a Austria

Los recuerdos de Márquez al pisar el circuito Twin Ring de Motegi fueron especialmente bonitos. El piloto del Repsol Honda Team llegaba a Japón justamente un año después de conseguir su Give Me 5, en una carrera que recordaremos toda la vida por la gran carambola que se dio durante aquella carrera y madrugada en España. Valentino Rossi y Jorge Lorenzo se iban al suelo, dándole al de Cervera un nuevo título mientras lideraba la carrera.

Este año la situación resultó ser algo más complicada. Volvía a llegar líder del mundial, aunque la distancia era muy corta como para tener la oportunidad de cerrar el campeonato. Las diferentes caídas en la primera parte del campeonato y el cero de Silverstone por el motor fueron los culpables, pero la lucha estaba servida. Tendría que ser otro fin de semana perfecto.

Las sensaciones a lo largo del fin de semana fueron buenas, aunque cambiantes. Las condiciones de la pista fueron complicadas durante las tres jornadas y es que si por algo recordaremos este Gran Premio de Japón sería por las constantes lluvias intensas que se vivieron a lo largo de los días. Márquez salía el domingo desde la tercera posición, después de regalarle la pole a Johann Zarco al decidir salir en último momento a pista con slicks. Estrategia que no le funcionó del todo para marcar una vuelta rápida. Salvó los muebles y más al darse cuenta que Dovizioso saldría desde la novena posición.

Márquez en Motorland / Foto: Lucas ADSC
Márquez en Motorland / Foto: Lucas ADSC

La carrera finalmente se disputó en condiciones de mojado. El italiano de Ducati hizo una salida magistral, llegando a los pocos giros a la cabeza de carrera, situándose delante de Zarco. Márquez intentó apretar al máximo, pudiendo pasara a Danilo Petrucci, quien estaba en primera posición hasta el momento. A partir de ese momento se desencadenó una batalla cuerpo a cuerpo con Dovizioso. El de Forli había pasado al piloto del Pramac Ducati para enfrentarse a la Honda que lideraba.

Los adelantamientos fueron constantes pero ya en la última vuelta el español parecía sentenciar su victoria con una cierta distancia. Un error, con el que a punto estuvo de irse al suelo, acabó con sus posibilidades, haciendo que Andrea Dovizioso se pusiera primero. Lo intentó en la última curva, casi entrando en meta, como si volviéramos a revivir el Gran Premio de Australia pero, una vez más, Ducati se llevó la victoria, manteniendo vivo el mundial.

La locura de Phillip Island

La lluvia viajó con los pilotos hacia tierras australianas para encontrarse una vez más en la pista. El Gran Premio de Australia volvió a resultar una carrera de alto riesgo esta temporada. Probablemente la más bonita de esta temporada y de los últimos años de competición en MotoGP. Pareció que se estuviera disputando otra vez la carrera de Moto3, fruto del grupo tan grande que encabezaba la lucha por la victoria y la gran cantidad de adelantamientos, haciendo que las posiciones cambiaran a cada paso por un nuevo sector.

Marc Márquez lucha por entrar en el podio de Montmeló / Foto: Marc González
Marc Márquez lucha por entrar en el podio de Montmeló / Foto: Marc González

Marc Márquez supo mantener la calma en una cita en la que se vio rodeado de varios pilotos peligrosamente agresivos como Johann Zarco o Andrea Iannone, y las dos Yamaha oficiales de Valentino Rossi y Maverick Viñales, que no se perderían este festín. El de Honda aprovechó los malos resultados de Andrea Dovizioso, que no pudo remontar posiciones, acabando en décimo tercer lugar. El español ganó la carrera después de varios encontronazos con Rossi o Zarco, con lo que pudo irse al suelo de un momento a otro, pero logró ponerse en cabeza y abrir un hueco que le daría la primera oportunidad de ser campeón en Sepang.

Primera bola de partido en Malasia

Las opciones eran claras y Márquez sabía la importancia de cerrar aquí un gran fin de semana. Sabía que no tenía que arriesgar más de la cuenta, aunque quisiera volver a España con su sexto título bajo el brazo. Le valía ganar la carrera o ser segundo, incluso si Dovizioso fuera primero, el título dependía de lo que él mismo hiciera. Las sensaciones sobre el asfalto -una vez más, mojado- no fueron del todo las esperadas. Se vio a un español un poco perdido en la tabla de clasificaciones, al menos hasta la FP4, donde pareció dar un gran paso adelante. 

La clasificación volvió a ser un desastre. Fue rápido pero una caída volvió a poner difícil la opción de salir desde la pole. No tardó mucho en volver a salir a pista, pero nada pudo hacer por mejorar los tiempos. Tendría que salir desde la séptima posición y remontar todo lo que pudiera ya desde la salida. Así fue, Márquez firmó una salida magistral, colocándose segundo a la llegada a la primera curva y encaminado a una nueva lucha.

Márquez felicita a Dovizioso por su victoria en Sepang / Foto: Repsol Honda Team (Twitter)
Márquez felicita a Dovizioso por su victoria en Sepang / Foto: Repsol Honda Team (Twitter)

Pero las condiciones de la pista complicaron las cosas al de Honda. Dovizioso le pasó, incluso Zarco pudo ponerse delante de él durante gran parte de la carrera. Se quedó en cuarta posición, sin arriesgarse más de la cuenta y dejando que el título se decida en Valencia, donde las posibilidades son aún mayores. Acarició el título con las yemas de sus dedos pero, finalmente, el italiano de Ducati ganó la carrera. Sexta victoria para Dovizioso, aunque rodeada de la polémica de las órdenes de equipo y el misterioso "mapping 8" que recibió su compañero de equipo. En cualquier caso, muy merecido por su parte.