El piloto francés fue rookie del año y piloto revelación la pasada temporada en MotoGP, incluso quedando en diversas ocasiones por delante de los pilotos oficiales de la fábrica diapasone, Valentino Rossi y Maverick Viñales. Por ello, Johann se veía capaz de pilotar la última versión de la M1 -a vista de que la de 2017 no fue de la forma que esperaban-, es decir, la que llevarán los respectivos pilotos del Movistar Yamaha, pero la fábrica denegó su petición ya que el equipo privado siempre lleva la moto del año anterior, y no quisieron hacer una excepción en el caso del francés.

“El Tech3 es el equipo satélite de Yamaha que lleva siempre la moto del año anterior, así que esta temporada llevaré la M1 versión de 2017. Si soy inteligente y puedo exprimir la moto al máximo no estaré muy lejos de los tres primeros del Mundial”, así es la positividad que muestra el galo de cara a la temporada que comienza en dos meses, a pesar de no tener la moto que deseaba.

Está claro que a Zarco, después de haber realizado una temporada impecable a pesar de ser rookie en la categoría reina, no le falta confianza y tiene las expectativas muy altas acerca de su futuro en el que si tiene oportunidad dará el salto al equipo oficial de Yamaha, pero está a la espera de Valentino y Maverick, que acaban contrato en 2018: “Yamaha está esperando la decisión de Rossi (sobre si renueva un año más a la espera de su retirada). Me toca a mi convencerles intentando acabar las carreras por delante de los dos pilotos oficiales. En cualquier caso, mi carrera no dependerá de las decisiones que tome Valentino”. Declaraba así Johann que intentará hacer las mejores actuaciones posibles para ganarse un buen puesto en unos años.