Uno de los conflictos que más dan que hablar cada gran premio son los límites de pista y las sanciones que ha comenzado ha aplicar dirección de carrera. El presidente no ejecutivo de Mercedes, Nikki Lauda, se ha unido a los que creen que estas sanciones solo sirven para dañar la competición y aposta por su eliminación.

Lauda no ha tenido ningún problema en mostrar su desacuerdo con estas sanciones: “Son totalmente equivocadas, evita que los pilotos compitan y da una oportunidad a otros pilotos de quejarse. Cuando alguien les adelanta, encienden la radio y dicen "se pasó de la línea blanca'. ¿Estamos locos?”, ha comentado el austríaco a la revista F1 Racing.

"Si no hay pianos, déjales competir, no penalices a nadie"

Además, el ex campeón del mundo no cree que sea un problema de los circuitos: “Lo primero de todo, los circuitos han tenido el desarrollo correcto durante los últimos 30 años, éste era el camino por el que tenía que ir la Fórmula 1, no hay duda, pero toda esta mierda de las penalizaciones, de si te pasas de la línea blanca o lo que sea, la odio”, ha seguido contando Lauda.

Adelantamiento pot el cual sancionaron a Max Verstappen en el GP de EEUU. Fuente: Lat Images
Adelantamiento pot el cual sancionaron a Max Verstappen en el GP de EEUU. Fuente: Lat Images

Nikki Lauda no quiere que se repitan espectáculos tan bochornos como el que se vivó en el Gran Premio de Estados Unidos en el que Max Verstappen perdió su podio. Lauda quiere que los pilotos puedan competir: “Usa cualquier sitio por el que puedas pasar porque los mejores pilotos compiten y si a la FIA no le gusta, entonces pon pianos. Si no hay pianos, déjales competir, no penalices a nadie. Déjales competir. No te metas. Es un problema de la FIA, he hablado con Charlie cientos de veces”, ha explicado.

Lauda tampoco ha duda en posicionarse en contra del halo: “Estoy completamente en contra del halo. Nadie obliga a los pilotos a competir, tienes que decidirlo antes de hacerlo, ¿quieres hacerlo o no? Estos tipos son los mejores del mundo y los que no puedan aceptarlo, necesitan quedarse en casa. Así que no me gusta este desarrollo y si sigue adelante, nadie verá la F1 porque los pilotos ya no serán nunca más héroes”, ha finalizado el austríaco.