La luz salió al final del túnel en Australia y el equipo McLaren consiguió igualar el mejor puesto obtenido durante los tres años que duró su unión con Honda.
El positivismo reina en Woking tras una carrera en la que la fortuna acompañó a Fernando Alonso tras la salida del coche de seguridad y el abandono de ambos Haas cuando se encontraban en cuarta y quinta posición, así como el accidente de Bottas el sábado que le relegaba a unos puestos retrasados que no pudo remontar durante la carrera el domingo.
Cierto es que hay que estar ahí para que la suerte te acompañe y así fue. McLaren mostró un gran ritmo en carrera, superior al de Renault, aunque tal vez algo por detrás de Haas, que le permitió estar en la lucha con sus rivales directos, incluso Alonso se permitió mantener durante más de 20 vueltas al RedBull de Verstappen a su estela. Vandoorne por su parte cuajo una carrera muy regular y consiguió un gran noveno puesto.
En clasificación los resultados no fueron tan brillantes y ambos coches se quedaron fuera de la Q3, un resultado que deberán mejorar si quieren obtener los mismos resultados que en Albert Park
Fernando Alonso
Su quinto puesto en Australia sacó la sonrisa de todos los seguidores de la Formula 1 por ver al histórico piloto luchando por unos puestos que no acostumbraba a pelear en los últimos años.
Aunque sigue lejos de su gran ambición, que es ganar carreras, el piloto asturiano espera que las mejoras que prevé traer el equipo McLaren para este gran premio les hagan estar mas cerca del TOP 3 y poder asentarse como el cuarto equipo de la parrilla, lo que le haría asegurarse ocupar sin problema el TOP 7 de la parrilla en este Gran Premio de Baréin.
Alonso ha pronosticado que pronto estarán luchando contra el TOP 3, lo que haría las delicias de los fans de todo el mundo, al poder ver igualdad y batallas entre los mejores pilotos de la categoría
Stoffel Vandoorne
El piloto belga inicia con buen pie su segunda temporada en la Formula 1 y busca obtener un buen resultado en el circuito en el que debuto en 2016, cuando suplió a su actual compañero de equipo tras su accidente en Australia.
Se muestra cauto, pero ilusionado: "No podemos dormirnos en los laureles, las carreras de Bahréin y Shanghái son exigentes para el coche y es importante que mantengamos una buena fiabilidad si queremos maximizar nuestro potencial. La competencia es feroz y tenemos que seguir apretando para conseguir más puntos” dijo el belga, que espera que el coche este en condiciones de plantar batalla a Ferrari Red Bull y Mercedes tras el Gran Premio de China.
Hasta entonces el objetivo no es otro que meterse en Q3 cómodamente y seguir mejorando el coche para lograr los objetivos y los sueños de todo el equipo británico.
