Las declaraciones de los pilotos tomaban protagonismo este jueves en el paddock de Baréin, donde todos atienden a los medios de comunicación para expresar sus sensaciones de cara al fin de semana.

Entre ellos, el actual líder del mundial, Sebastian Vettel. El alemán admitió que tuvo suerte en Australia para llevarse la victoria, y valora la diferencia que hay entre Ferrari y Mercedes: “Si miras el ritmo, los test, la primera carrera, está bastante claro que Mercedes son los más rápidos. Probablemente con un margen de tres, cuatro décimas”, a la vez que se mostraba seguro diciendo que “todo está muy apretado tras ellos”.

Vettel cree que en la clasificación si dieron otras circunstancias, pero que realmente no están tan lejos: “En general. Creo que en clasificación la diferencia fue algo más grande de lo que probablemente debería haber sido. Si miras toda la sesión, está claro que en Q2 no consiguieron una buena vuelta y luego en la Q3 sí. Max tuvo un pequeño error en Q3 y yo también, por lo que tendríamos que haber estado un poco más cerca. Creo que la diferencia es igual en cualquier condición”.

Tras estas palabras, quiso responder el actual campeón del mundo, Lewis Hamilton. El británico dijo que la diferencia aún no estaba clara entre ambos coches tirando a la basura las declaraciones de Vettel.

“Ferrari ha tenido una gran mejoría. Están bien en carrera, podríamos tener una ligera ventaja sobre ellos. Creo que es difícil de decir en una carrera. Tendré una idea mucho mejor de esto en las próximas carreras”, decía Lewis.

La temporada 2018 tan solo ha vivido un gran premio, que estuvo más determinado por un Safety Car que por el rendimiento de un monoplaza. Baréin tampoco será el punto clave para saber la diferencia entre Mercedes y Ferrari, pero si todo sigue igual tanto Hamilton como Vettel lucharan por llevarse ese quinto Mundial al que aspiran ambos.