El Campeonato del Mundo de Superbikes se disputa desde 1988. Desde entonces, el duelo Europa-Japón por tener la moto de serie más competitiva ha estado más que reñida. Ducati es la marca con más títulos de la máxima categoría (17), seguido muy de lejos por Honda (4) y Aprilia (4). Curiosamente, Yamaha, una marca histórica, tan solo tiene un campeonato, el logrado por Ben Spies en 2007.

Diez años sin títulos, seis sin victorias

Tras su regreso, Yamaha no ha tenido la competitividad que esperaba, pero carrera tras carrera avanzan para volver a ser lo que eran, para volver a estar en el pódium. La marca nipona no vence desde 2011, y ese es su principal objetivo en estos momentos: un equipo ganador.

Recién proclamados campeones del mundo de MotoGP con Jorge Lorenzo, Yamaha apostó por regresar a Superbikes. Sin embargo, su competitividad no sería la misma en el campeonato de motos de serie. Llevaba desde 2011 sin competir. Se fueron siendo subcampeones, y tenían en mente que su R1 fuese competitiva desde el principio. La realidad fue que la R1 estaba muy lejos de las Kawasaki o las Ducati en 2016.

Notables mejoras año tras año

En 2016, el equipo estaba formado por los pilotos Sylvain Guintoli y Alex Lowes, terminaron undécimo y duodécimo de la clasificación, respectivamente. Las sensaciones sobre la R1 no eran nada buenas, pero la fábrica nipona trabajó duro para ser más competitivos.

Yamaha y su R1 quieren recuperar su mejor versión en el campeonato de serie. Foto: WorldSBK.com

Para 2017, Yamaha pretendía ser la tercera marca, justo por detrás de Kawasaki y Ducati. La marca de los tres diapasones superó con creces a sus rivales directos, acabando en quinta y sexta posición de la general, justo por detrás de los equipos oficiales de Ducati y Kawasaki. El objetivo se había logrado en tan solo dos años.

Esa misma temporada, el equipo tenía en sus filas a un Alex Lowes, que ya conocía a la R1, y un Michael Van der Mark que veía en Yamaha un equipo más competitivo que Honda. Lowes, además de ser quinto de la general, logró cuatro pódiums: dos segundos puestos en Misano y Magny-Cours, y dos terceros en Donington Park y Losail. Van der Mark, que acababa de subirse a la R1, logró un tercer puesto en Portugal y otro en Magny-Cours. En este último circuito lograron el triplete, segundo y cuarto, pero aún se le resiste la victoria a Yamaha.

La victoria aun se resiste para Yamaha

En 2018, con los mismos pilotos sobre la R1, se sitúan actualmente quinto y sexto de la general, superando a Tom Sykes, piloto oficial de Kawasaki. Ambos pilotos lograron un nuevo doblete en la última ronda de Tailandia. Lowes tercero, Van Der Mark segundo. El holandés se quedó de nuevo a las puertas de la victoria. Yamaha nunca había estado tan cerca del primer puesto desde hace varias temporadas.

En Yamaha esperan dar un paso adelante y tener a alguno de sus pilotos en la cuarta posición de la general. Para ello, debería superar a uno de los pilotos oficiales, como ahora mismo hacen con Sykes, y a Xavi Fores. El piloto de Ducati está teniendo un gran arranque de temporada con una moto satélite, y en Yamaha esperan que terminen adelantándole en la general.

La victoria será cuestión de tiempo. En Yamaha no están por la labor de cambiar el nuevo reglamento; ni los cambios de revoluciones ni en el sistema de parrilla de salida. Los nipones se ven beneficiados en ambos casos, y esperan que eso les ayude para lograr la ansiada victoria y, por qué no, volver a ser campeones de Superbikes. El trabajo duro siempre recoge buenos resultados.

Último podio de Tailandia, con Van Der Mark segundo y Lowes tercero. Foto: WorldSBK.com
Último podio de Tailandia, con Van Der Mark segundo y Lowes tercero. Foto: WorldSBK.com