El piloto del Pata Yamaha ha consolidado hasta ahora su mejor fin de semana del año, ya que llegaba a su ronda de casa, delante de toda su afición y con todos los suyos en el box. Ya en el primer entrenamiento dio un golpe de autoridad, colocándose en segunda posición con un crono de 1:35.931, aunque bajó un poco el rendimiento en cuanto a tiempos rápidos en la segunda sesión, en la que fue décimo, dos puestos más abajo que su compañero Alex Lowes. Finalizó el primer día de la mejor forma posible, siendo el piloto más rápido tanto en la FP3 como en la combinada, con un registro de 1:35.156, distanciándose a 0.2 segundos del segundo mejor piloto del viernes.
Todos estos buenos resultados aumentaron la confianza de Michael y, tras pasar directamente a la Superpole 2, se clasificó en séptima posición, así que si quería ganar o quedar en el podio tendría que remontar algunas posiciones a pilotos buenos y difíciles como Jonathan Rea, Tom Sykes o Xavi Forés, la revelación del equipo privado de Ducati este año. Aun así, van der Mark luchó hasta ser segundo en la primera carrera.
En la segunda prueba de la cita de los Países Bajos, el de Yamaha partía en octavo puesto, así que también tendría que luchar contra siete pilotos si quería lograr coronarse en casa. Finalmente logró subir al último cajón del podio. “He tenido un buen comienzo y una buena primera vuelta. Para ser sincero, he tenido algo más de dificultades que ayer. Creo que la temperatura ha subido un poco y el agarre delantero no era tan bueno, ni mi ritmo, así que estaba un poco preocupado”, expuso el holandés.
También admitió que Jonathan le adelantó y "lo mejor que podía hacer era seguirlo”. Reconoció también que tuvo un problema con la moto en las últimas vueltas y le fue "imposible batirse con él”. Sin embargo, cree que ha sido un fin de semana “increíble”, porque han sido rápidos desde el principio y había una “multitud increíble de fans”, zanjando con haber disfrutado ambas carreras y estar feliz de irse con sus dos trofeos.
La próxima ronda es en Imola, el fin de semana del 11 al 13 de mayo. “Espero con ganas el Round de Imola, pero primero esperamos tener una buen test en Brno. Tenemos algunas ideas para probar con la moto y luego ir a Imola. Creo que tenemos una buena configuración de base, y, con suerte, Imola lo confirmará. Si podemos encontrar un poco de velocidad extra en Brno, podremos pelear de nuevo delante de los fans italianos de Yamaha”, dictó el piloto de la categoría reina.