Jonathan Rea ha vuelto a hacer de las suyas en una nueva ronda del campeonato del mundo de Superbikes, ha vuelto a demostrar su autoridad y ha ganado la primera prueba de la cita italiana después de que Chaz Davies llevara haciendo doblete dos años consecutivos. "Teniamos un buen paso y traté de entender mi propio ritmo para poder abrir un pequeño hueco, así que me organicé rápidamente y al final han sido tres segundos de ventaja, creo que hemos mejorado y respondido a la perfección. Es una victoria genial, he arriesgado para ganar y he disfrutado mucho, mi equipo me ha dado una moto perfecta", admitía Jonathan.
Las carreras en solitario también tienen una parte difícil, y es que no hay piloto de referencia por delante y hay que mantener la concentración más que al 100% para no cometer un pequeño error que lleve a una caída y todo se esfume en un segundo. En cuanto a eso, Rea menciona el cambio de temperatura que ha habido en la pista durante la carrera. "La temperatura cambió mucho, creo que ha sido la más alta que hemos tenido durante el fin de semana en la pista, de 40 a 46 o 47 grados, y he tenido algunos problemas de tracción con el neumático trasero en la entrada, aunque no en la salida así que esto es bueno", decía el de Kawasaki.
Algo importante era tener clara la configuración para la carrera: "Hemos trabajado con el set up que probamos en los test de Brno y ha funcionado [a pesar de las altas temperaturas], por lo que estoy contento porque Brno es un circuito rápido y fluído y ambos son circuitos muy stop and go, así que estoy muy contento con esto", declaraba el #65, al que al parecer los test en el trazado checo le ha venido a la perfección para entender mejor su moto.
Cuando una victoria sucede no todo es gloria, porque mañana será otro día y al haber ganado saldrá desde la tercera fila. Por ello, mantiene que hay que "estar concentrados para mañana" porque "será difícil mejorar para llegar arriba". También ha dicho sobre el top 4 que: "habrá una gran lucha", y "espera llegar junto a Tom a ellos".