Tres victorias consecutivas y un podio en lo que va de temporada. Datos que sitúan a Marc Márquez en el punto de mira y rememoran, a modo de eco del pasado, el inquebrantable triunfo que perpetuó en la temporada 2014, cuando se erigió campeón del mundo de la categoría reina con trece victorias, diez de ellas consecutivas.
Esa vez, Márquez no ha tenido un inicio tan brillante, pero la superioridad de su moto y la madurez de su pilotaje (al menos, de cara a afrontar el campeonato) le colocan nuevamente como máximo favorito para encauzar su séptimo título. Actualmente, 14 carreras le separan de su objetivo, en las que seguro el espectáculo, al más puro estilo Márquez, estará servido.
El mundial, de cara para Márquez - María Viñas (@mariaviilo)
La temporada sólo acaba de comenzar, pero Marc Márquez ya tiene encaminado su séptimo título mundialista. Podría parecer precipitado, es la realidad, pero lo cierto es que son muchos los motivos para pensar que el 'Big 6' va a pasar a la historia en tan sólo unos meses. El siete se acerca más rápido de lo que parece o de lo que HRC espera.
Desde que comenzaron los test de pretemporada allá por enero en Sepang, Marc Márquez ya estaba en el punto de mira. Era el campeón de ese año y el nivel no podría estar por debajo, y menos después de conseguir dos coronas consecutivas. El ritmo demostrado sorprendió, y mucho, a todo el paddock, quienes no dejaron de hablar desde el minuto uno del buen trabajo que Honda había llevado a cabo en invierno, fabricando una moto con una potencia superior a la de años anteriores. Habían creado una máquina muy competitiva, difícil de desbancar en pista.
Así fue. Márquez llegó a Qatar con las dudas de todos los años, pero era evidente que se guardaba algo en el bolsillo. No es una pista que se les dé especialmente bien a los del ala dorada, pero la lucha que mantuvo con Andrea Dovizioso hasta la última curva, y su segunda posición, hicieron ver al resto de fábricas que la temporada pintaba muy bien para ellos.
Argentina, sin embargo, es mejor no recordar. El de Cervera se fue a Austin con el primer cero en su casillero, pero con buenas sensaciones tras haberse impuesto durante todo el fin de semana. Al fin y al cabo, los números están ahí y Marc Márquez fue muy superior al resto de pilotos. Del COTA poco más se puede decir, sigue siendo el Rey de las Américas y nadie puede arrebatarle el título. Es uno de sus circuitos favoritos y se nota.
Pero entonces, entre todos estos buenos resultados, llegó Jerez. La gira europea comenzaba y con ella un nuevo mundial. Lo cierto es que ya en 2017 la carrera había salido bien. Mejor fue este año. Sin pensarlo ni sin estar en muchas de las apuestas de los aficionados, Márquez se marcó una carrera de diez. Se escapó de sus rivales y dominó como en Austin. Segunda victoria consecutiva y líder del mundial. Lo mismo pasó hace dos semana en Le Mans. No ganaba allí desde 2014, año del récord absoluto en victorias, pero el grandísimo trabajo de él y su equipo lo hizo posible.
No se puede negar que el campeón del mundo sigue en racha o, más bien, sigue trabajando en no bajar el ritmo. Honda le ha dado una moto espectacular esta temporada para poder hablar en pista, como a él le gusta. Ya son tres victorias consecutivas y en Mugello podría firmar la cuarta, después de rodar en unos test en los que sacaron buenas conclusiones. El nivel del año 2014 está muy elevado y conseguir los diez triunfos consecutivos es muy difícil con la igualdad que se ha estado apoderando de la máxima categoría estos años.
Lo único que se puede afirmar a ciencia cierta es que Marc Márquez es líder con 95 puntos, 36 de distancia con Maverick Viñales, que se coloca segundo. Una ventaja muy buena para las pocas carreras que suman de campeonato, que dan al '93' un margen de error, por lo que podría pasar teniendo en cuenta que siempre va al límite y las salvadas podrían acabar de un momento a otro. Con más distancia, Márquez bajará el ritmo y sería difícil verle fuera de los podios, sobre todo en las siguientes citas, muchas de sus favoritas. Sachsenring y Aragón, entre otros, son territorios de la hormiga y no desaprovechará la ocasión para escaparse y seguir encarrilando su séptimo mundial.
Hasta Valencia, no hay nada decidido - Raquel Jiménez (@Rachelina20)
La temporada ha comenzado de una excelente forma para Marc Márquez que, con tan solo cinco pruebas disputadas, se encuentra liderando la clasificación del mundial a poco más de una carrera de su actual perseguidor, Maverick Viñales. Una situación que hace pensar que el catalán tiene llano el camino hacia su séptimo título mundialista, el cuarto en la categoría reina y su tercera corona consecutiva.
Sin embargo, con tan sólo cinco Grandes Premios disputados, teniéndose aún que llevar a cabo más de la mitad de las citas, ¿se debe dar por hecho que Marc Márquez tiene todo de cara para llevarse este año la corona de Campeón del Mundo?
Una pregunta a la que pocos se atreven a contestar, pero de la que gran parte habla. Y es que, si echamos la vista atrás, varios han sido los casos a lo largo de toda la historia del Campeonato del Mundo que han demostrado que hasta los últimos kilómetros del mundial todo puede cambiar.
Sin ir más lejos, uno de los ejemplos se dio en la temporada 2015, cuando Valentino Rossi perdió su décima corona tras ser sancionado saliendo el último en el Gran Premio de Valencia por una maniobra arriesgada en la carrera anterior. Hasta entonces, el italiano había dominado con contundencia la clasificación e iba a por su décimo título mundial, sin embargo, de la noche a la mañana todo cambió, adjudicándose finalmente Jorge Lorenzo su último título del mundo.
Marc Márquez también fue víctima de la mala suerte del campeón cuando en la temporada 2011 sufrió una caída que le provocó una lesión ocular importante, alejándole de conseguir su primera corona de campeón de la categoría intermedia. Una dolencia que le causó problemas para terminar la temporada y que a día de hoy sigue recordando.
Y es que las lesiones han lastrado muchos mundiales a pilotos que, a pesar de su fortaleza mental y técnica, han perdido todas las opciones por una racha de mala suerte. Uno de los casos más conocidos es el de Dani Pedrosa, que desde que llegó al campeonato del mundo se ha visto muy limitado en la lucha por su primer título de la categoría reina debido a la mala suerte que siempre le ha acompañado.
Además, el de Cervera cuenta con rivales muy fuertes de la talla de Valentino Rossi, Andrea Dovizioso, Maverick Viñales o Dani Pedrosa que, a pesar de haber tenido un inicio complicado, han demostrado que no le pondrán nada fácil alzarse como Campeón del Mundo esta temporada. Por lo que, dar por sentado que el ‘93’ se adjudicará la medalla de oro en noviembre es un hecho que, a estas alturas, aún causa muchas dudas debido a los cambios que pueden producirse hasta poner el broche de oro de una temporada que, sin duda, será del todo emocionante.