A estas alturas del mundial resulta algo paradójico que una escudería como Mercedes, en liza con Ferrari por el mundial, quiera acabar con las órdenes de equipo. Y es que Wolf ha sacado a la luz, según recoge Crash.net, que están estudiando eliminarlas: “Realmente no me gustan las órdenes de equipo, no son geniales, ni buenas para el deporte ni para ninguno de los dos pilotos”.

Sin embargo, tan solo hay que echar la vista sobre Monza para ver que eso no ha sido así, al menos hasta ahora. Es innegable que sin el trabajo de Valtteri Bottas reteniendo a Kimi Räikkönen, Lewis Hamilton no habría ganado en casa del cavallino, y tampoco habría sacado de quicio a los miles de acólitos allí congregados.

“Hamilton no quiere nada regalado y Valtteri no quiere renunciar a nada. Lo estamos viendo carrera a carrera. Lo discutimos esta mañana, había varios escenarios y no había necesidad hoy. Veremos que sucede en Singapur. Quiero retroceder ese instante lo más posible”, continuó.

Además, el alemán añadió que la estrategia de Italia también benefició al finés, que acabó en tercera posición tras la penalización a Max Verstappen: “Sabemos que tuvimos que mantenerlo en pista mucho tiempo porque ya perdimos la posición ante Verstappen, y teníamos que mantenerlo así para crear la mayor compensación posible de neumáticos al final de la carrera. Mantenerlo allí fue su mejor oportunidad para estar en el podio

Asimismo, Bottas es consciente de su rol dentro del equipo y reconoció que está “dispuesto a cooperar cuando tenga sentido”. Pues dicho momento podría llegar, de nuevo, en Singapur, pista en la que se vaticina una superioridad de los Ferrari. Aunque no todo está decantado a su favor, porque como sucedió el año pasado y en Monza: todo depende de la cabeza de Sebastian Vettel.