De esta forma, el equipo de Laurence Stroll, padre del piloto Lance Stroll, ha eludido dicha suma de dinero al caducar la sanción impuesta por la FIA en Francia por no soltar de forma segura el coche en el pit lane, conocida por unsafe release. Y es que por aquel entonces, el equipo recibió una multa de 15.000 euros, más otros 85.000 en caso de volver a repetirse en un plazo de 12 meses.

Y en efecto, en el reciente Gran Premio de Singapur volvió a suceder, lo que les supuso unos 5.000 euros aunque no los citados 85.000. Esto se debe a que al pasar la titularidad de la escudería a otras manos, algunos elementos deportivos se heredan y otros, como en este caso, no.

Respecto a la carrera de Marina Bay, aunque el incidente, una rueda suelta, no fue tan grave podría haber significado la activación de la multa, aunque como reconoció Charlie Whiting, director de carrera, que “los comisarios estaban al tanto de la multa en suspenso”.

“Fue una buena decisión, creo, porque establecía por qué los pilotos no obtendrían una nueva especificación de motor y caja de cambios, por ejemplo. En relación a esto, ellos decidieron que no era necesario aplicar dicha multa. Creo que el castigo fue el normal. No fue como si se hubiera desprendido una rueda, solo salió demasiado pronto”, zanjó.

Por otra parte, sobre el incidente de Singapur, los comisarios señalaron que “el piloto del coche 31 (Ocon) estaba preparado para arrancar desde su posición de parada en boxes siguiendo las instrucciones del equipo”. En dicho instante, “el coche 20 (Magnussen) se acercaba por el carril rápido cuando el conductor del monoplaza 31 comenzó a moverse mientras la luz roja seguía mostrándose, y el equipo la cambió a verde”.