Pecco Bagnaia vuelve a ser líder del mundial de MotoGP. A veces se cae, sí, pero es indiscutiblemente el piloto más regular del mundial, o al menos el que siempre está en las posiciones de cabeza. En Jerez ha vuelto a demostrar su solidez domesticando a unas KTM que parecían salvajes.

Brad Binder lideró casi toda la carrera, pero tuvo que dar su brazo a torcer en un duelo de últimas vueltas con Bagnaia, en el que el piloto italiano lo adelantó y después dio una exhibición de defensa hasta la última curva. No solo Bagnaia vuelve a ser líder, sino que lo hace con 22 puntos de ventaja en la general.

Pedrosa ovacionado por todo el paddock tras su séptima posición en carrera

La carrera de Bagnaia ha sido propia de un piloto que se sabe superior. Contemporizó al principio, mantuvo la calma después de un apretado adelantamiento con Jack Miller y supo esperar su momento, que llegó a cinco vueltas del final. Ahí se echó encima de Binder y le ganó en un duelo ajustado hasta la misma bandera a cuadros.

La victoria de Bagnaia sin embargo no empaña el papelón de KTM en Jerez. Las motos naranjas han sido la gran sorpresa, y hacen un doblete en el podio con Binder segundo y Miller tercero. Más problemas tuvo Dani Pedrosa, que salió mal, se quedó atascado detrás de Luca Marini y ha acabado séptimo. Se le notó el óxido en el cuerpo a cuerpo, pero brillante su fin de semana.

Tanto Binder como Miller trepan al top cuatro de la general del mundial, y este empujón de KTM en Jerez, con nuevo motor y mejoras aerodinámicas, parece que invitan a pensar en los austriacos como el único rival de Ducati en lo que queda de mundial. Porque está claro que Aprilia se ha desinflado.

Aleix Espargaró salía desde la pole position, pero en las cuatro salidas de este fin de semana las KTM le han fulminado. Perdió muchos puestos en la primera vuelta y al final solo ha podido llegar a meta quinto, y gracias a que Johann Zarco tuvo una caída al final. Maverick Viñales iba aún más retrasado y se le ha roto la cadena en la última vuelta, así que abandona.

Cuatro salidas porque en esta carrera largas hemos vuelto a tener dos. El domingo ha empezado con susto, ya que Fabio Quartararo y Miguel Oliveira han sufrido un accidente que ha mandado al portugués al hospital. Quartararo no tenía demasiado espacio, pero aún así ha recibido una incomprensible Long Lap Penalty, que encima ha hecho mal y ha tenido que repetir.

Quartararo ha podido remontar algo tras todas estas desgracias, pero tan solo ha acabado décimo, justo por delante de la otra Yamaha, la de Franco Morbidelli. De no ser por la caída de Zarco y la avería de Viñales, ninguna moto japonesa hubiese entrado en el top diez. Porque la mejor Honda ha sido Takaaki Nakagami, noveno.

Y es que el día de Honda ha sido muy duro de nuevo. Álex Rins y Joan Mir se cayeron ya en la primera vuelta de la carrera. El piloto del Repsol Honda parece desesperado en su nuevo equipo. Al menos puntúa Stefan Bradl en su 'wild card', decimocuarto. Por cierto, lo de Raúl Fernández, decimoquinto, empieza a ser insostenible.

El que llegaba aquí líder del mundial, Marco Bezzecchi, también se cayó en el tramo final de la carrera, cuando estaba empezando a subir el ritmo y a remontar algunas posiciones. Hubiese acabado en el top diez, quizá cerca de Pedrosa, pero en cualquier caso defender el liderato del mundial contra Bagnaia era imposible. Ahora mismo, el '1' es el mejor de MotoGP.