Despertaba Jerez con el circuito vestido de gala para presenciar el fin de fiesta del motociclismo nacional. Pese al frío, ni el sol quiso perderse el espectáculo. Mientras los pilotos mundialistas atraían las miradas de los aficionados, los pilotos de Stock Extreme se preparaban para la penúltima batalla. Carmelo Morales hizo buena su pole y llegó primero a final de recta. Por detrás, Xavi Forés se recuperaba de sus problemas iniciales y no tardó ni dos curvas en tomar la cabeza.

Junto a él, Kenny Noyes e Iván Silva también daban cuenta de Carmelo, que de repente se vio en cuarta posición, lo que aprovechó Xavi para coger unos metros de ventaja. Fue el propio Morales el que neutralizó la escapada del líder con una bonita remontada. Tomó de nuevo la cabeza e intentó ralentizar el ritmo de carrera, lo que le costó un par de toques con Silva que cerca estuvieron de terminar con ambos en el asfalto. Y sólo habían pasado seis vueltas. Las hostilidades terminaron con Carmelo perdiendo varios segundos, que tampoco tardó muchas vueltas por enjugar. Por delante, Forés se mantenía a la rueda de Silva, una posición que le daba el título. 

Sin embargo, la vuelta de Morales supuso la reagrupación del terceto; y a falta de apenas cinco giros para el final, no había nada decidido. Carmelo no se lo pensó a la hora de atacar a Xavi, pero espero un par de vueltas para volver a enseñarle la rueda a Silva, que no dejaba de mirar atrás. Daba igual, ese hachazo había sido el definitivo. Forés se resignó a posponer el desenlace a la segunda manga, y se quedó a rueda de Iván mientras Morales se iba en solitario en busca de una nueva victoria. A dos del final, Xavi decidió atacar el segundo puesto, que aseguró en el giro final cuando Silva se fue largo al intentar recuperar la plaza.

Ese fue el último cambio de posiciones, y Morales entró vencedor por delante de Forés y Silva. Cuarto fue Kenny Noyes y quinto Robertino Pietri. Pero lo más importante era que el título tendría que esperar, asegurando la emoción hasta el último suspiro.