Se apagaba el semáforo en el Ricardo Tormo y Miguel Parra, que partía desde la primera posición, marcaba su territorio liderando el grupo. Muy de cerca le seguían Francisco Gómez y Manuel González; parecía que los líderes estaban claros.
Las caídas llegaron en la primera vuelta, con Jamie Davies e Iker García en el suelo. Mientras tanto, en el grupo cabecero González, en un intento de plantar cara a Parra durante la entrada a meta de la segunda vuelta, marchaba a la grava, cosa que Gómez aprovechó para pasar al piloto del HMA Racing. Este no fue el único cambio en las primeras posiciones, Álex Toledo se hacía con la 3ª posición y veía de cerca la oportunidad de subir a podio.
Francisco afianzaba el primer puesto en cada paso por curva y a los perseguidores les costaba arrebatárselo, pero el baile de posiciones no había hecho nada más que empezar con Miguel y Álex como protagonistas de la pelea por el segundo puesto del cajón.
Corría la vuelta diez cuando se volvía a presenciar caída, esta vez de Lukas Wendeborn y Daijiro Sako, quien también tuvo que cumplir anteriormente una sanción impuesta por dirección de carrera.
La cabeza de carrera ampliaba sus plazas, siendo Eduard Melgar y Peetu Paavilainen los recién llegados a falta de seis vueltas para ver ondear la bandera a cuadros. Toledo finalmente perdía posiciones y se quedaba cuarto, pero el final de carrera con Paavilainen pasó de ser cuarto a la victoria. Miguel Parra se quedó con la miel en los labios desde el segundo puesto y Alejandro Díez quedaba tercero, en una carrera de remontada a lo grande, pasando hasta a 14 pilotos. Dejaban así el único podio completamente español de la jornada del FIM CEV Repsol en todas sus categorías que lo conforman.