Distinta trama, mismo desenlace. Johann Zarco volvió a ganar en Misano. A pesar de no ser el piloto más fuerte durante el fin de semana, el francés volvió a demostrar la confianza que tiene en sí mismo y sumó una nueva victoria, la tercera consecutiva y la sexta del campeonato. El gran error de Rins, el hombre con el mejor ritmo del fin de semana junto con Rabat y el propio Zarco, puso en bandeja el triunfo para el líder del campeonato. 

En la jornada del sábado, Misano vio una de las sesiones de clasificación más ajustadas que se recuerdan. 2 milésimas permitieron a Zarco sumar una nueva 'pole' frente al que había sido el gran dominador del entrenamieno, el español Álex Rins. Tito Rabat tampoco desentonó, y fue tercero, a una décima de sus predecesores. Se planteaba una carrera de lo más emocionante. 

Rins se llevó a Aegerter por delante en las primeras vueltas de carrera | Foto: Páginas Amarillas HP 40

El Gran Premio arrancó en el circuito Marco Simoncelli bajo un cielo que poco a poco se iba cubriendo, y con una temperatura que iba en descenso. La primera curva fue escenario del toque entre Tito Rabat y Takaaki Nakagami, el cual hacía perder muchas posiciones al catalán. Por delante, Aegerter, que partía quinto, tomó la cabeza gracias a un adelantamiento de lo más arriesgado sobre Zarco, a quien poco le faltó para irse al suelo. La maniobra fue aprovechada por Rins, quien, desde la segunda posición, se fue a la caza de Aegerter. 

Pocas vueltas después, Álex Rins cometió un grave error en la curva 14. El catalán pecó de optimista e intentó superar a Aegerter en un punto muy complicado, y cuando quiso rectificar, su moto ya estaba en el suelo y arrollando al suizo. Rins pudo volver a la competición, aunque sus aspiraciones en carrera habían terminado. 

Zarco se escapa y Rabat remonta

Tras este accidente, Zarco se vio en cabeza casi sin quererlo, y el francés empezó a distanciarse de Syahrin y Corsi, segundo y tercero respectivamente. El malayo poco a poco fue perdiendo posiciones, a la vez que Folger las recuperaba y subía hasta la cuarta posición tras superarlo. Por detrás, Tito Rabat fue de menos a más, y, poco a poco, fue quitandose de encima a los pilotos que tenía por delante. Simón y Syahrin fueron algunas de sus víctimas. 

En el tramo final de carrera, con Zarco ya destacado, apareció un actor inesperado en la cabeza del Gran Premio: Álex Rins. El catalán, tras caerse, se enganchó a los líderes e inclusó llegó a adelantar a Folger en pista. Esa actitud le costó una advertencia por parte de dirección de carrera, y posteriormente, tras hacer caso omiso a las peticiones de los comisarios, recibió la bandera negra y fue descalificado. 

Rabat fue de menos a más, y logró un meritorio segundo puesto | Foto: Estrella Galicia Marc VDS

Tras esta anécdota, Nakagami y Rabat aprovecharon la pelea que Folger y Corsi estaban manteniendo por la segunda posición para acercarse a ellos. Con unos neumáticos en mejor estado que el de sus rivales, el japonés y el español dieron cuenta de ellos y se enzarzaron en una bonita pelea, en la cual ninguno de los dos quiso darse por vencido. Finalmente, Rabat pudo superar a Nakagami y coger unos valiosos metros de ventaja. 

En cabeza, Zarco lo tenía todo controlado, y nadie pudo privarle de una nueva victoria. Los resultados que se dieron en Misano le permitían al francés tener la primera oportunidad de llevarse matemáticamente el campeonato en la siguiente cita del Mundial, el Gran Premio de Aragón. Rabat, segundo, pudo darse por satisfecho con un resultado con sabor a victoria tras una carrera complicada. Nakagami, tercero, regresaba al podio dos años después de sumar el último, precisamente en Misano.