A casi un mes de que el Mundial de Motociclismo llegue al trazado austríaco propiedad de Red Bull, siendo la nueva cita del calendario, los primeros temores por sus instalaciones han llegado. Las infraestructuras están en perfecto estado, donde la tecnología ha cogido un papel fundamental y las conexiones con el paddock están en buenas condiciones.

Los puntos conflictivos son varios. El más importante es la estrechez de la pista en algunas partes del trazado y la cercanía con los muros, especialmente en la zona de meta y en la parte alta, donde estos pasan a ser directamente los temidos guardarraíles. Este hecho ha provocado que muchos pilotos temieran con la posibilidad de que sucediera de nuevo una desgracia, puesto que estaba más alejado el muro de la curva 12 de Montmeló que el guardarraíl o muro en esas zonas, donde dificilmente llegará a los 5 metros en el mejor de los casos.

Red Bull
Red Bull

A todo esto hay que sumarle un factor adicional: el corto recorrido del trazado austríaco puede provocar más de un susto en el momento de encontrar un hueco libre para hacer una vuelta rápida, donde la categoría de Moto3 será la que más sufrirá, por el simple motivo que será prácticamente imposible que cada piloto encuentre 150 metros sin tráfico en pista. Y eso, sumado al hecho de ser un circuito nuevo, será un importante hándicap.

Pero lo realmente importante y peligroso, por si la cercanía de los muros fuera poco, es el factor asfalto. Durante el Gran Premio de Austria de Fórmula 1 se estrenó un asfalto relativamente nuevo, puesto que no tenía nada que ver con el del pasado año al ser reasfaltado. La sorpresa que se encontraron fue la siguiente: las características de este asfalto cambiaron radicalmente, esta vez fue mucho más abrasivo, tanto en altas temperaturas como en bajas. En el primero de los casos aparecían el temido blistering”, donde aparecen ampollas en el neumático, y en el segundo ocurrió el estallido a final de meta del neumático trasero derecho de Vettel.

Circuito de Red Bull Ring
Circuito de Red Bull Ring

Quizás no tenga nada que ver, pero resulta llamativo este hecho, siendo un trazado con nueve curvas y tan solo dos de ellas a izquierdas, siendo el franco izquierdo el que más sufre. Faltará por ver qué compuesto llevan los proveedores de gomas. En MotoGP con Michelin todo apunta que el asimétrico debería hacer acto de presencia, pero en Moto2 y Moto3 no existe tal compuesto y seguramente optarán por los juegos más duros.

Por otro lado, entrando en un terreno más emocional o visual, el circuito de Red Bull Ring está situado en pleno bosque, donde los desniveles dejarán unas imagenes dignas de Brno o Austin y será uno de los más rápidos del calendario, ya que las largas rectas austríacas permitirá alcanzar velocidades vertiginosas. Pero cabe señalar que las tres primeras curvas serán sumamente peligrosas al ser de ángulo recto y en subida o bajada, siendo ciegas en apoyo.

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