El circuito de Austria, más conocido como Red Bull Ring, está situado en la localidad de Spielberg, al este del país. El trazado fue denominado originalmente como Österreichring ("circuito de Austria") tras su construcción en 1969. Años después, en 1996, debido al patrocinio de la telefónica A1 Mobilkom, el circuito cambió su nombre por A1-Ring; hasta que en 2010 Red Bull adquirió el circuito. A partir de ese momento, el trazado pasó a denominarse Red Bull Ring y, gracias a la inversión de la multinacional, comenzó su remodelación y la construcción de infraestructuras más modernas.

El circuito cuenta, actualmente, con una longitud de 4.326 metros, con una anchura de 13 metros. Cuando fue inaugurado alcanzaba los 5.119 metros de longitud. Su recta más larga supera el medio kilometro, 626 metros. En cuanto a las curvas, posee un total de 10: 7 a derechas y 3 a izquierdas. El trazado de la curva 10 será variado este fin de semana por su peligrosidad.

El Campeonato del Mundo de Motociclismo se disputó en el trazado austriaco únicamente entre los años 1996 y 1997 a causa de la peligrosidad de este. Y, a pesar de ser remodelado para la Fórmula 1, con escapatorias asfaltadas, se decidió no disputar más carreras en él. Fue utilizado temporalmente para otras actividades de ocio. Así, el Mundial regresa, este fin de semana, por primera vez a Austria desde 1997.

El parón veraniego llega a su fin y Marc Márquez buscará mantener su hegemonía en el campeonato, mientras que Lorenzo y Rossi intentarán reducir la distancia que les separa del catalán, quien con una gran madurez y regularidad ha conseguido terminar líder la primera mitad de la temporada. Las Ducati, por su parte, llegan a un circuito que les es favorable. Ya lo demostró Iannone en los pasados test en el Red Bull Ring, donde 'voló' en su montura marcando el mejor registro. Por otro lado, Dani Pedrosa tratará de encontrar el feeling que le falta con su Honda esta temporada.