Desde que Jack Miller sufriera una dura caída en el 'warm-up' del Gran Premio de Austria, el pasado 14 de agosto, la recuperación del australiano no ha seguido su curso esperado. Vistos los problemas del joven piloto de Honda, el equipo Marc VDS ha decidido tomar cartas en el asunto y buscarle un sustituto para la carrera de Aragón. Y el elegido ha sido un viejo conocido del Mundial: Nicky Hayden, campeón del mundo en 2006 y actualmente piloto de la marca del ala dorada en el Mundial de SBK.

Pese a su lesión, Miller compitió en Silverstone, finalizando en 16ª posición, pero las molestias fueron a más hace dos semanas en Misano, y los médicos han recomendado parar al subcampeón de Moto3 del año 2014 antes de la gira asiática de finales de octubre. De hecho, algunas pruebas realizadas a Miller tras la cita italiana revelaron que tenía hasta dos fracturas en su mano derecha. Demasiados daños como para seguir compitiendo, además, a un nivel por debajo del habitual.

El equipo Marc VDS ha anunciado hoy mismo que el norteamericano Nicky Hayden será su sustituto en Aragón, circuito en el que ya fue tercero en 2010, a lomos de una Ducati, en el que ha sido, curiosamente, su último podio en la categoría. Hayden atesora tres triunfos en MotoGP, 25 podios y, lo que es más importante, un título mundial, el de 2006, conquistado en un dramático y famoso final en Valencia que puso a cinco años de dictadura de Valentino Rossi en la clase reina.

"Primero de todo quiero desear una rápida recuperación a Miller", admite el de Kentucky, que añade: "Es un piloto en el que tengo mucha confianza para el futuro, así que espero que se ponga bien pronto para que pueda mostrar su potencial. Sólo necesita estar al 100% y brillará", comenta el piloto de Honda. "Es una experiencia inusual para mí porque nunca he sustituido a un piloto en un Gran Premio", comenta Hayden, que está, no obstante, ilusionado con la oportunidad.

"Tengo una buena relación con Honda y cuando Ten Kate me  lo propuso, ni dudé en aceptar", asegura el estadounidense. "Es una buena oportunidad de pasarlo bien. Si me quedara en casa, probablemente cogería una moto de entrenamiento y luego vería la carrera en la TV, así que es mejor estar allí. Sé que MotoGP es complicado siempre porque el nivel es muy alto, así que incluso en esta ocasión habrá cosas que aprender", comenta Hayden en el comunicado oficial, en el que avisa de la dificultad del reto: "En comparación con SBK, son motos distintas, ruedas distintas... Aún así, hay que agradecer a Marc VDS y Estrella Galicia por la oportunidad".