Conocíamos el dato, Marc Márquez se proclamaba campeón del Mundial de Motociclismo tras quedar primero en Japón con un fabuloso tiempo, 42:34.610, hasta 2.992 segundos menos que el segundo clasificado en aquel Gran Premio, Andrea Dovizioso, que sí ganó en Malasia, tras siete años sin pisar el primer puesto en un podio de motociclismo.

Repasando un poco la temporada de Márquez, se puede comprobar como el de Honda no obtuvo el resultado esperado en anteriores carreras como Saint Marin, Gran Bretaña, República Checa o Austria, pero a pesar de ello ha conseguido hacerse con el Mundial. 

Esta temporada, sin embargo, ha podido alcanzar la regularidad que le ha faltado en las anteriores, pilotando más relajado, muy alejado de su característica actitud agresiva en pista que le hacía perder muchos puntos. La afición así se encandiló de la estrategia y de su forma de plantear las carreras, lo que ha convertido, domingo a domingo, el motociclismo en algo atractivo. A su labor hay que sumar el buen hacer de Lorenzo, Pedrosa, Rossi (segundo clasificado de forma matemática), el mencionado Dovizioso o Maverick Viñales, actual cuarto clasificado en la tabla general del Mundial.

Tras la victoria en Japón, Márquez obtenía los puntos necesarios y se proclamaba campeón del Mundial de Motociclismo, a pesar de que aún quedaban el Gran Premio de Australia (donde obtuvo el primer 0 de la temporada debido a su caída), Malasia y Valencia, el cual se disputa el próximo 13 de noviembre. El catalán ya suma cinco títulos y aspira a igualar o superar los nueve de Rossi.

El pasado fin de semana en Sepang, ya con el título en el bolsillo, se fue al suelo por segundo domingo consecutivo. El piloto del Repsol Honda rodaba en la cuarta posición cuando sufrió una caída en la curva 11, que le hizo perder cualquier opción de podio en Sepang. Tras el accidente y el Gran Premio, Marc expresó a los medios de comunicación su disgusto, ya que los pilotos españoles recibieron abucheos cuando fueron presentados y parte de la grada celebró la caída del campéon.

En Cheste se espera ver a un Marc más tranquilo y sin preocupaciones. A partir de entonces no se le verá rodar en pista hasta el Gran Premio de Qatar el próximo 26 de marzo. La temporada va llegando a su fin y Márquez descansará al término de la misma, de cara a comenzar con las pilas cargadas la siguiente campaña, que se avecina delicada, debido a la calidad de los pilotos que vienen pisando fuerte desde Moto2 y a los veteranos que ya pisan con zapato de acero en MotoGP desde hace tiempo.