Cuando Jorge Lorenzo comienza el viernes en las primeras posiciones de la tabla de tiempos, solo significa una cosa: gran posibilidad de pole position y victoria. Y así ha sido este fin de semana, el último de la temporada 2016. El mallorquín pretendía despedirse de la escudería japonesa por todo lo alto. Una frenética primera posición batiendo su propio récord del año pasado y una carrera liderada de principio a fin son el fruto del trabajo cometido. “Todavía no puedo asimilar todo lo que hemos conseguido este fin de semana”, declaró el español en rueda de prensa.
Tanto el propio piloto como su equipo, el Movistar Yamaha MotoGP, pueden presumir de palmarés. Para Jorge Lorenzo, el Gran Premio de la Comunidad Valenciana ha sido su carrera número 250, dato que lo coloca entre los pilotos históricos del mundo de las dos ruedas. A sus veintinueve años ha conseguido 44 victorias en total, 65 poles, empatando así a Marc Márquez, y 3 Campeonatos del Mundo de la categoría reina. “Empecé con 20 años haciendo la pole en Qatar”, recuerda el mallorquín sobre sus inicios. “No podía dar un mejor regalo a la gente de Yamaha que me ha apoyado durante tantos años”, añadió.
Respecto a la carrera, consiguió ganar como es habitual en él: liderando de principio a fin. Tenía buen ritmo y se lo dejó claro a sus rivales, pero en las últimas cinco vueltas el piloto del Repsol Honda Team, Marc Márquez, le recortaba cada vez más décimas. Sin embargo, fue el mallorquín el que consiguió cruzar línea de meta en primera posición, lo que provocó estar “muy contento” tras “una gran carrera, muy precisa”. Las últimas vueltas fueron decisivas, pero el español consiguió hacerse con la ansiada victoria, cerrando así una era en su trayectoria profesional. “He aguantado la presión de Márquez y ahora hay que celebrarlo por todo lo alto”, finalizó Jorge Lorenzo.