La temporada 2016 de MotoGP fue un claro ejemplo de cómo ganar un campeonato del mundo sin tener la mejor moto. Marc Márquez logró dominar con solvencia esta temporada en un año donde la Honda llegaba a la primera carrera en Qatar como la moto oficial más débil de la parrilla. El gran talento del pilotaje del catalán, unido a las inestabilidades interiores de Yamaha y el mal arranque de Ducati permitieron a Honda y Márquez coger confianza en un campeonato que no pintaba nada bien para la marca del ala dorada.

Este 2016, pues, ha acabado saliendo redondo para la escudería japonesa, pero no todas las temporadas van a ser así. El ejemplo claro lo marcó Honda la temporada anterior, siendo el año 2015 uno de los peores para la marca en los últimos tiempos. Con una moto muy inestable, un Dani Pedrosa ausente en el arranque del campeonato y un Marc Márquez que probó muchas veces el asfalto, Honda no sólo dejó de ganar el mundial sino también perdió el título de constructores que consiguió llevarse Yamaha gracias a su doblete.

Es por este motivo que, pese a haber ganado esta temporada 2016, Honda debe seguir trabajando para mejorar con creces una moto que está lejos de ser perfecta. La pretemporada pasada para la marca japonesa fue una auténtica pesadilla, algo que debe evitar de todas las maneras esta vez de cara a 2017.

De momento, las sensaciones no son del todo buenas. Si bien es cierto que los test en Cheste no fueron tan desastrosos como los de la temporada pasada, tampoco acabaron de satisfacer las exigencias de sus dos pilotos, Marc Márquez y Dani Pedrosa. Aunque los pilotos no han querido echar leña al fuego y se han limitado a decir que estos primeros test han sido positivos de cara a recopilar información para la moto del próximo año, lo cierto es que los resultados obtenidos tienen margen de mejora.

Exceso de confianza en 2015

El problema de Honda empezó en la temporada 2015. Tras haberse proclamado campeón del mundo Marc Márquez en sus dos primeros años en MotoGP (con un apabullante dominio en la segunda temporada) Honda decidió echar toda la carne en el asador de la puesta a punto del prototipo 2015 al que ya se había convertido en el número uno del equipo.

Si bien es cierto que la puesta a punto de Dani Pedrosa había resultado en la moto campeona de Márquez, no era ilógico darle el voto de confianza a el joven ilerdense tras sus dos grandes temporadas que habían llevado a la marca japonesa a lo más alto. Sin embargo, en 2015 se vio que la moto no llegaba preparada al arranque del mundial, y junto con un Marc Márquez inexperto frente a situaciones de clara inferioridad en su máquina, Yamaha se hizo con el control del mundial dejando demasiado pronto a Honda sin opciones.

Honda, sin embargo, pareció no aprender, y volvió a prescindir de las opiniones de Dani Pedrosa a la hora de preparar el prototipo de la siguiente temporada 2016. El resultado fue una pretemporada negra que auguraba lo peor para la marca japonesa. Afortunadamente para el equipo liderado por Nakamoto hasta la fecha, el talento de Márquez logró eclipsar una Honda con muchas lagunas que consiguió dejar KO a Pedrosa en las primeras carreras.

¿Contarán con Dani Pedrosa?

A partir de 2017, el jefe japonés ya no estará al frente del equipo, por lo que se esperan cambios en el funcionamiento interno de la marca. La renovación de Dani Pedrosa podría ser un indicativo de la intención de Honda de volver a contar con él de manera más activa en un desarrollo de la moto 2017 para evitar sustos al arranque del campeonato. Si bien sus 11 temporadas en la categoría reina sin cosechar el título de campeón parecen indicar que al catalán le falta un plus para conquistar la cima del motociclismo, nadie pone en duda su gran labor de equipo que ha realizado desde su llegada, manteniendo el nivel de la Honda alto a pesar de los cambios constantes en su alrededor hasta la llegada de Márquez en 2013.

Honda, pues, tiene en realidad el equipo perfecto: un talento innato como el de Márquez que puede ganar mundiales por muchos años y una valuosa aptitud como la de Pedrosa, que ya ha demostrado que cuando él participa en el desarrollo de la moto de forma notable, la marca japonesa es competitiva. Sólo falta que Honda sepa gestionar este equipo de mejor manera de la que lo ha hecho en las dos pasadas temporadas para, además del equipo perfecto, lograr también la temporada perfecta.