El piloto español Héctor Barberá celebró en el Gran Premio de Catalunya del pasado fin de semana (10-11 de junio), un logro del cual solo pueden presumir algunos de los grandes mitos del mundial de motociclismo. Valentino Rossi, Jorge Lorenzo, Dani Pedrosa y Andrea Dovizioso son algunos de los que ya han conseguido consagrarse como pilotos veteranos. Los dos italianos y los dos españoles son los únicos, en activo, en el Mundial que han alcanzado los 250 Grandes Premios, cifra mágica a la que llegó el de Dos Aguas al cruzar la línea de salida en el trazado catalán.

Héctor Barberá considera que es un gran mérito conseguir alcanzar esta cifra en el mundial. “Esto empezó todo como un juego, y ya van 250 carreras. Es un orgullo. Es prácticamente más de la mitad de mi vida. Le debo mucho a este campeonato, y es difícil de explicarlo con palabras cuando realmente te has pasado media vida en MotoGP", confiesa el piloto.

Aterrizando en el Mundial

El piloto valenciano llegó al mundial en la temporada 2002 con el equipo Aprilia Aspar hace ya 15 años. En ese momento llegó a la máxima competición de motociclismo un adolescente dispuesto a deslumbrar con su talento. Disputó su primera carrera de 125cc en el gran premio de Japón, debut que compaginó con el Campeonato de España de Velocidad. Ese año, Barberá se proclamó Campeón de España con el Team Aspar, y en el Mundial cerró su primera temporada con un decimocuarto puesto en la clasificación general.

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Barberá celebrando una de sus victoria en 125cc. /FOTO: hectorbarbera.com

En 2003, con 16 años recién cumplidos, sumó sus primeros podios en la competición y logró sus primeras victorias. La primera de ellas en el circuito de Donington Park,  lo que le llevó a terminar su segunda temporada en el mundial con un tercera posición. Tras cambiar de equipo en 2004, Héctor Barberá se proclamó subcampeón del Mundo de 125 cc con el  equipo Seedorf Racing. Con la victoria en el circuito de ‘su casa’, en el Circuito Ricardo Tormo de Cheste, se convirtió en el primer piloto valenciano en inscribir su nombre en el palmarés de vencedores del circuito que pone fin a la temporada.

Caminando en la buena dirección: 250cc

El piloto de Dos Aguas dio el salto a la categoría intermedia de 250 cc, lo que hoy conocemos como Moto2, en el año 2005 de la mano del equipo Fortuna Honda y con Jorge Lorenzo. Aquella temporada la terminó en un logrado “top 10”. En 2006, en Turquía logró su primer podio y en China, la cuarta carrera de la temporada, lograba su primera victoria en esta categoría.

En 2007 fichó por el Team Toth. Durante las dos temporadas que Barberá disputó con el equipo húngaro no terminaron de funcionar las cosas. Además, en 2008 sufrió una de las peores lesiones de su carrera deportiva en el circuito japonés, Motegi, donde se fracturó tres vértebras y esto no le permitió terminar la temporada.

El piloto valenciano en su última temporada de 250cc. /FOTO: hectorbarbera.com
El piloto valenciano en su última temporada de 250cc. /FOTO: hectorbarbera.com

Aun así, en el año 2009 el valenciano resurgió de un mal año y afrontó la que fue su última temporada en la categoría intermedia. Barberá fue protagonista de grandes luchas con Marco Simoncelli y el japonés Hiroshi Aoyama, que le llevaron a proclamarse subcampeón del Mundo de 250cc.

Un dato que guarda su palmarés es que la última victoria de la historia en el circuito valenciano de Cheste de la categoría 250cc, la guarda Héctor Barbera, un buen recuerdo de la que fue su última victoria en ‘casa’.

El salto a la categoría reina

La temporada 2010 supuso el paso de lo que muchos consideran hacer un sueño realidad. Ese mismo año fue el momento en que el piloto de Dos Aguas debutó en MotoGP. Su estreno en la categoría reina fue de la mano del equipo de Aspar, sobre una Ducati. Con este equipo, Barberá convivió dos temporadas (2010-2011) y terminó muchas carreras entre los diez primeros, en el que era un año de duro aprendizaje en MotoGP.

En 2012 hizo un cambio de equipo y pasó a la Ducati publicitada bajo el nombre del Pramac Racing. Con esta montura, el piloto valenciano consiguió cerrar una de sus mejores temporadas disputadas en MotoGP.

Hace cuatro temporadas comenzó la unión de Héctor Barberá con el equipo Avintia Racing. Con este equipo Barberá ha conseguido uno de los mayores logros de su carrera deportiva, ser campeón del Mundo de la categoría Open de MotoGP. Desde la primera prueba en Catar de la temporada 2015, Héctor Barberá se postuló como uno de los claros candidatos a llevarse el título de dicha categoría, hasta una la loca carrera transcurrida en Misano, en la cual Loris Baz se hizo con la cuarta posición el domingo, y eso le llevó a colocarse en la primera posición provisional de la clasificación de pilotos de la categoría Open. De esta forma, el piloto de Dos Aguas tuvo que remontar durante las pruebas restantes hasta que llegó a la última carrera, la de Valencia, donde consiguió hacerse con este título.

En Jerez de este mismo año ha celebrado las 125 carreras en MotoGP junto a su actual equipo Reale Avintia, con el que afronta su temporada número 16 en el Mundial: “He sido competitivo en 125 y 250 con Bautista, Dovizioso, Lorenzo, me he medido con ellos con la misma mecánica e incluso peor. Y he sido dos veces subcampeón, pero yo soy una persona muy ambiciosa que aspiro a todo y hasta ahora he aguantado corriendo incluso con motos de calle, sin tener ninguna posibilidad, y es bastante duro. Lo que tengo ahora es un privilegio, una moto buena, competitiva, y ahora es el momento de demostrarlo".

Héctor Barberá en su gran premio 250, en Montmeló. /FOTO: Marc González
Héctor Barberá en su gran premio 250, en Montmeló. /FOTO: Marc González-VAVEL

Para Héctor Barberá el comienzo de la temporada 2017 ha sido duro. Sus problemas de adaptación a la  Ducati Desmosedici GP16.2, con la que está afrontando el mundial de la temporada 2017, que ha acusado la retirada de las aletas que a partir de esta temporada han quedado prohibidas y su rotura de clavícula en la pretemporada, le han hecho sufrir en este comienzo de temporada. Después de decidir que tenía que cambiar su estilo de pilotaje en Argentina, el español dio un paso adelante con su nueva táctica en el Circuito de las Américas y consiguió entrar en los puntos.

A partir del Gran Premio de Mugello, el valenciano llegó al punto de inflexión que le llevaría a conseguir en el Gran Premio de Cataluña una novena posición, la mejor de toda la temporada. El piloto quiere aprovechar la gran oportunidad y exprimir al máximo su Ducati para poder conservar su asiento en el box, que le lleve a ampliar, aún más, su magnífico palmarés.

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Sobre el autor
Ariadna Tixell Romero
Estudiante de periodismo