Valentino Rossi, que en un principio había sido declarado baja para el GP de Aragón, ha anunciado a través de un comunicado oficial que viajará a Aragón y decidirá si puede correr o no tras el FP1. El italiano se subió el pasado lunes a una Yamaha R1 de calle para realizar un test en Misano y probar su estado físico de cara a la cita en Alcañiz. Si bien esta jornada fue poco concluyente, pudiendo dar sólo 10 vueltas a causa de la lluvia, el de Tavullia se sometió a una segunda prueba el martes en la que logró completar un total de 20 giros en tandas de 2/3 vueltas. Un resultado todavía insuficiente pero que permitió un soplo de optimismo para el #46.

"Afortunadamente, ayer realicé un buen test con la YZF-R1M en Misano. También había probado el día anterior, pero la lluvia me impidió seguir después de unas vueltas. Ayer conseguí completar 20 vueltas y encontrar las respuestas que estaba buscando. El test fue positivo", explicó el italiano a través de la web oficial de Yamaha.

Sin embargo, la expectación se concentraba en torno a la mañana del miércoles, momento en que databa el último chequeo médico del piloto antes de tomar la decisión final junto a sus médicos. Tras el resultado positivo de éste y tan sólo 22 días después de fracturarse la tibia y peroné derechos, Valentino Rossi ha decidido poner rumbo a Aragón y probarse allí, pilotando la M1 y en condiciones reales de carrera. El viernes se someterá a una protocolaria revisión médica antes del primer entrenamiento libre, paso fundamental para aprobar su reaparición sobre la M1. 

"Naturalmente, al final del test estaba sufriendo un poco, pero esta mañana visité al Dr. Pascarella para un chequeo y el resultado volvió a ser positivo. Al final decidí que viajaría a Aragón para intentar correr con la M1 este fin de semana. Acerca de si seré declarado apto para correr, tendré la verdadera respuesta después del FP1, porque pilotar la M1 es un desafío mucho mayor. Ya veremos", concluyó Rossi.

El de Tavullia pactó con sus médicos intentar reducir a la mitad los plazos establecidos inicialmente para su regreso a la competición y, aunque los primeros ensayos de la cita en Alcañiz serán la prueba concluyente para determinar el verdadero estado físico del piloto, no se debe desestimar la posibilidad de ver a un Rossi implacable este fin de semana.