Lo volvió a hacer una vez más. Marc Márquez no falló en otro de los que es sus circuitos claves de la temporada. Primero fue Austin, luego Sachsenring y ahora Motorland. Él mismo lo dijo, es uno de sus trazados favoritos y había que aprovechar la oportunidad. Así fue. El ilerdense da un zarpazo al campeonato y se pone, de nuevo, como líder en solitario con 224 puntos, aventajando con 16 a Andrea Dovizioso.

Sufrió pero ganó 

La lluvia apareció el viernes al inicio de los primeros entrenamientos libres y, aunque en la FP1 se puso al frente de la clasificación, acabó el día en cuarto lugar, con su compañero de equipo encabezando la combinada. Para el día siguiente el trabajo aumentó, teniendo que poner a prueba todos los neumáticos de cara a la carrera. Encabezó la FP3 pero ahí se acabó su suerte. La FP4 y la Q2 estuvieron marcadas por dos caídas. La segunda de ellas le dejaría en la quinta posición de parrilla.

Marc Márquez durante los entrenamientos del viernes en Motorland / Foto: Lucas ADSC
Marc Márquez durante los entrenamientos del viernes en Motorland / Foto: Lucas ADSC

Aunque el Warm Up se retrasó y se acortó debido a la intensa niebla de la mañana, el de Honda volvió a liderar los últimos cronometrados del Gran Premio de Aragón. Tuvo clara su elección de neumáticos y salió a dar el 100% en la pista. La victoria en Motorland sería clave para lograr el campeonato. 

Puede que el sábado no hubiera sido su mejor día una semana más, pero el domingo volvió a sorprendernos. Lleva haciéndolo durante varios grandes premios seguidos: se puede caer cien veces, pero en carrera sabe clavarlo. El pasado domingo no fue menos. Delante de su afición, el #93 ofreció, una vez más, un espectáculo para el recuerdo. Tuvo muchos sustos, iba al límite pero consiguió adelantar a todos sus rivales. Incluso la curva 12, esa que dice tener "cruzada", no se le resistió.

Pero lo más icónico llegaría después, en sala de prensa. Fue allí donde Márquez, contento con su quinto triunfo, declaró no haberse sentido nada cómodo con su Honda. Un problema con los frenos y con la goma delantera hicieron que el español sufriera más de lo normal, incluso más de lo que él esperaba. Aún así, otros 25 puntos que se anota a la clasificación general.

Sus rivales estuvieron cerca

Las malas sensaciones sobre su moto no fueron lo único que condicionó la carrera de Marc Márquez. El de Cervera quiso ponerse en primera posición lo antes posible viendo el ritmo que traían sus rivales, especialmente la de su compañero de box. La de Dani Pedrosa fue una carrera magnífica. Salía algo más atrás de lo esperado pero supo remontar a gran escala, pasando línea de meta en segunda posición a menos de un segundo del líder. Declaró que de haber pasado antes a Viñales y a Rossi podría haber luchado por la victoria.

Jorge Lorenzo cerró también un gran fin de semana. Hizo pole el sábado tras pasar por la Q1 y el domingo subió, por segunda vez con Ducati, al tercer escalón del podio mejorando el primer año de Valentino Rossi en la marca de Borgo Panigale. Un tercer puesto más especial que el de Jerez por estar más cerca de la ansiada victoria, según explicaba el mallorquín.

Jorge Lorenzo, el pasado domingo en Motorland / Foto: Lucas ADSC
Jorge Lorenzo, el pasado domingo en Motorland / Foto: Lucas ADSC

Por otra parte, Andrea Dovizioso y Maverick Viñales no pudieron poner el broche de oro al fin de semana. El italiano no se encontró a gusto durante toda la competición en una de las pistas en las que sufre más. Terminó séptimo pero con motivación para encarar la gira asiática donde podremos verle más fuerte. Márquez no lo tendrá fácil.

El español sufrió la consecuencia de una mala elección en el neumático trasero para la carrera. Se decantó por la goma dura que no habían probado en todo el fin de semana. Finalmente pudo salvar los muebles y acabar cuarto, aunque difícil recortar casi 30 puntos en las cuatro carreras restantes. 

Valentino Rossi y su acto heroico

A principios de este mes saltaba la noticia. Valentino Rossi tendría que ser operado de una fractura de tibia y peroné tras una caída mientras entrenaba. Se quedó sin opciones de correr en Misano y Yamaha le buscó un sustituto para Aragón, pero el italiano volvió a hacer lo imposible.

Tan solo 20 días después, Il Dottore viajaba a Motorland para pasar un chequeo médico que le permitiera volver a subirse a su M1. Dicho y hecho. El viernes pudimos verle enfundándose su mono y su cascos habitual para salir a pista y poder rodar durante los entrenamientos. Pero fue el sábado cuando pudimos ver a todos de pie para aplaudir al italiano: Valentino cruzaba la línea de meta marcando el tercer mejor tiempo de la jornada. Una actuación magnífica.

El domingo no fue para menos. Rossi se mantuvo en la lucha por la victoria durante gran parte de la carrera. Pudimos verle luchar con Márquez, Viñales o Pedrosa, con quien incluso llegó a tener un incidente en la recta de atrás al que no le dio mayor importancia. Al fin y al cabo terminó quinto, una posición más que suficiente para él y con unas sensaciones muy positivas de cara al triplete.

Valentino Rossi el viernes en Motorland / Foto: Lucas ADSC
Valentino Rossi el viernes en Motorland / Foto: Lucas ADSC