Valentino Rossi sufrió una fractura en la pierna derecha el pasado mes de agosto mientras realizaba, en su tiempo libre, una excursión con amigos. El italiano no puede despegarse de la moto ni en su tiempo libre y esta caída hizo que Rossi tuviera que pasar por quirófano perdiéndose así el Gran Premio de San Marino. Rossi forzó para correr en Aragón y, finalmente, terminó quinto. El italiano también estuvo a punto de no correr el Gran Premio de Mugello por otro accidente en el Circuito de Cavallara. Finalmente, Valentino Rossi pudo correr en su casa y finalizó en cuarta posición.

El director de Yamaha, Lin Jarvis, ha explicado que los contratos dicen que los corredores tienen que pedir permiso si van a hacer alguna actividad que no haya estado previamente predefinida. "¿Hemos prohibido a algún piloto hacer cosas? Sí. Por ejemplo, carreras de bicicletas que, para mí, son más peligrosas que las de MotoGP" añadía el director de la marca japonesa. Cabe destacar el ejemplo de Maverick Viñales. El piloto español, amante de la bicicleta, solicitó a Yamaha la posibilidad de correr la Quebrantahuesos. La marca japonesa lo desestimó.

La decisión

Por todos estos antecedentes (primero en Mugello y después en San Marino), el italiano está planteándose no realizar motocross ni enduro una vez esté inmerso en la temporada. Todo ello con objetivo de no aumentar los riesgos de que, a la edad de Il Dottore (38 años), una lesión pueda trastocar una temporada de ensueño. “El problema que nos encontramos es el de siempre. No podemos entrenarnos con las motos de MotoGP, así que tenemos que hacerlo con otras, de distintas disciplinas. El motocrós ya estaba en mi lista negra porque todos nos hemos hecho daño: yo, Morbidelli y demás”, expone Rossi.

Cabe esperar a la temporada que viene para ver si Valentino Rossi cumple con su palabra. Il Dottore quiere tener una temporada tranquila de lesiones para cumplir una de sus últimas temporadas en la categoría reina del motor.