Marc Márquez consiguió una segunda posición en Japón que le dejó con un sabor agridulce ya que Dovizioso le iba a recortar puntos (de hecho está a 11 puntos) en la lucha por el Mundial de MotoGP. El de Cervera tiene 11 puntos más que el italiano, pero en cuanto a primeras posiciones en carrera, hay empate: cinco triunfos para ambos. Cabe destacar que, Marc ha sufrido 23 caídas en lo que va de temporada; mientras que Dovi sólo se ha caído cuatro veces. El de Honda Repsol es el segundo que más caídas ha sufrido en lo que llevamos de campeonato (detrás de Lowes que lleva 26) y, a falta de tres citas claves, ha superado su récord de caídas en una temporada (2016 con 17 caídas).

Márquez está convencido de que la Honda de esta temporada es mucho más competitiva que la de la pasada, aunque no del todo. En condiciones de mojado, el de Cervera ha reconocido que no se encuentra cómodo con la misma. Es más, al terminar el Gran Premio de Japón, Marc reconoció que en varios momentos se vio en el suelo nipón aunque aseguró estar acostumbrado a "esta sensación propia de la Honda de este curso".

"En términos generales, la moto de este año me permite ser más competitivo que la de 2016, pero en agua me encontraba mejor con aquella. Con ella era un poco más fácil ir rápido. Este año se puede hacer, pero tienes que confiar bastante en ella. Hay un punto en el que parece que te vas a caer, pero cuando superas ese miedo vas tirando", ha explicado Márquez previo al Gran Premio de Australia, donde todo hace indicar que las condiciones metereológicas no serán las mejores. Márquez tiene que pensar rápido y actuar sin complicaciones por un título que está tocando con la punta de los dedos, pero con un Dovizioso que se lo puede arrebatar en cualquier momentos de las tres últimas grandes citas del año.