Jorge Lorenzo llegó esta temporada a la marca de Borgo Panigale con la intención de volver a resurgir una fábrica que había conseguido su último título de MotoGP en el año 2007, con Casey Stoner a la cabeza del equipo. El español llegó con la mejor motivación posible, pero su adaptación ha sido algo más compleja de lo que el equipo esperaba, complicándose sobre todo en pretemporada y la primera mitad de la temporada, siendo Jerez la excepción.

Fue su compañero de equipo, Andrea Dovizioso, quien cogió la riendas del box rojo, consiguiendo un protagonismo que nunca antes había sido de tan gran escala. El piloto italiano ha demostrado de que pasta está hecho, demostrando que nunca ha estado fuera de luchar por su primer mundial. Este año, ha llevado la batalla hasta el final de temporada, avivando el título en Malasia y llegando con opciones a Valencia, igualando las seis victorias del campeón del mundo, Marc Márquez.

Gigi Dall’Igna, director general de Ducati, ya había trabajo con el mallorquín cuando coincidieron en 250cc, con dos títulos bajo el brazo. El italiano declaró en una rueda de prensa no estar contento con el año de Lorenzo en Ducati, haciendo una valoración de cómo ha sido la temporada: “Claramente no podemos estar contentos de la temporada 2017 de Lorenzo. Creo que el primero en no estar contento es él mismo, seguramente teníamos una idea diferente de cómo iba a desarrollarse su Mundial”.

“Debo decir, sin embargo, que el progreso que ha hecho de mitad de temporada en adelante es muy positivo. Hasta el punto de que le ha permitido de ser protagonista y luchar por la victoria en algunas carreras”, explicó el italiano, recalcando también las buenas hazañas del español en su primer año con la Ducati.

Dall´Igna destaca también la dificultad y el esfuerzo del español para adaptarse a la Desmoseidici, suponiendo un gran cambio con la Yamaha M1, la única moto que el piloto había podido conducir en la categoría reina: “Si tengo que hacer un razonamiento posterior, es cierto que el pase de la Yamaha a la Ducati ha sido, seguramente, muy complicado para un piloto que solamente ha conducido la M1, porque sí hay una dificultad objetiva”, dijo.

El director italiano cerraba su intervención poniendo toda la confianza sobre Jorge Lorenzo de cara a la próxima temporada, esperando una mejora clara del mallorquín con el inicio de los test esta semana. “Si bien en cierto que no estoy contento con la temporada en su conjunto, debo decir que sí tengo la confianza de lo que será capaz de hacer en el futuro Lorenzo sobre la Ducati”, concluyó.