El piloto de Hyundai Hayden Paddon, estaba realizando un rallye bastante bueno, al colocar por segundo rallye consecutivo el Hyundai entre los 3 mejores de la clasificación. 

El neozelandés inició la especial de 15 kilómetros de Värmullsåsen con una buena ventaja sobre el tercer clasificado Otsberg, pero llegó a la meta con su coche humeando vapor y con el panel de luces interior lleno de señales de advertencia.

“Fue probablemente uno de los peores tramos de mi vida”,explicó Paddon. Además el kiwi volador señaló que le pareció ''muy difícil'' correr en tierra de nadie, sin nada que ganar y mucho que perder. ''Mis trazadas eran malas, cometí muchos errores y después recorté en una curva y me llevé un poste de madera que había en el interior”,añadió el neozelandés.

“No creía que fuese a ser un problema, normalmente no lo sería, pero debido al peculiar ángulo de impacto que hizo un agujero en el radiador y el coche perdía tiempo en cada curva restante''. Nunca es bueno que salga vapor y el agua del coche, fue un alivio cuando vimos un pequeño agujero y pudimos solucionarlo”.

Tras reparar la fuga, Paddon llegó al podio de llegada en Karlstad y protagonizó una imagen poco habitual,  llenando el sistema de refrigeración con una botella de champán. Paddon  se mostró satisfecho al término de la prueba final: “Me sorprendí a mí mismo con el segundo puesto, es bueno para el equipo y nos mantiene en la pelea por el campeonato de marcas”. De esta manera el piloto número 3 de Hyundai es cuarto en el campeonato del mundo igualado a puntos con el español Dani Sordo. 

“Es alentador también para el futuro. Sabemos que el coche nuevo va a seguir mejorando y que ahora puedo pilotar mucho más rápido. También aprendí más sobre Sébastien y por qué el siempre ataca por los puntos en el Power Stage. Creo que tener ese objetivo le hace mantenerse concentrado”, concluyó el neolezandés.