No corren buenos tiempos para Tom Sykes. Atrás quedó aquel piloto imbatible a una vuelta y dominador desde que el semáforo se apague. Pese a su mejora en el último mes y medio, sigue sin poder derrotar de forma regular a Jonathan Rea en igualdad de condiciones. Los nuevos neumáticos no se adaptan a la perfección al pilotaje del británico y el bagaje de tres victorias en los últimos 12 meses es, como poco, decepcionante.

La vida deportiva de Sykes ha dado un giro en los últimos 365 días. Hace un año, ganaba en Laguna Seca de forma autoritaria y encarrilaba su camino hacia el que sería su segundo título consecutivo. Estaba en una posición privilegiada, con 44 puntos sobre Guintoli con sólo tres pruebas por disputarse y su dominio en la categoría era más que evidente. Pero los acontecimientos irían en cadena.

Perdió el título de 2014 por detalles

La mejora de la Aprilia de Guintoli, un exceso conservadurismo del defensor del título y algunas carreras en lluvia, circunstancia en la que Sykes no se siente cómodo, hicieron que el Mundial llegara con vida a Qatar. Allí Guintoli fue imbatible y contó con la inestimable ayuda de Loris Baz, compañero de Sykes, que se saltó las órdenes de equipo de Kawasaki para entregarle en bandeja el campeonato al veterano Guintoli.

Foto: crash.net

Ese rebelde comportamiento le costó el puesto a Baz, que fue reemplazado por Jonathan Rea, un piloto con un reconocido talento poco explotado a lomos de una débil Honda. Sin embargo, Sykes partía con cierta ventaja por su conocimiento de la Kawasaki Ninja y por su experiencia de luchar por títulos mundiales. Era un escenario en el que Rea, por increíble que parezca, era un debutante.

Tras ocho pruebas disputadas y apenas cinco por venir, Rea tiene el Mundial encarrilado tras completar el mejor inicio de temporada de toda la historia. Once victorias y el segundo puesto como peor resultado dice todo sobre cómo le va a Rea en su nuevo equipo. Ha aniquilado a un campeón de Sykes, reduciendo su talento al de un mortal. El piloto explosivo de vueltas supersónicas ya no es el que era. Y mucho tiene que ver el aspecto psicológico.

No encuentra la manera de batir a su rival

Para Sykes ha sido muy duro, más aún tras perder el título de 2014 por muy poco, ver llegar a un nuevo piloto y que le domine de tal manera. No sólo lo reflejan los resultados, sino también las sensaciones. Rea ha ganado carreras de todas las maneras: por superioridad, remontando, en la última vuelta, o dejando a Sykes sentado en el momento que quisiera. Las tres únicas victorias de Tom han sido en carreras en las que Rea no ha podido competir con él. Siempre que se han encontrado en la pista, Rea ha salido vencedor.

Foto: Mirco Lazzari/Getty Images

Con el Mundial 2015 perdido, Sykes debe recuperar sensaciones. Reinventarse. Tiene tiempo para pensar un plan contra Rea. Salir desde la 'pole' y tirar a muerte no vale contra 'Jonny'. Debe aprender a cuidar mejor los neumáticos para llegar más vivo al último tercio de las carreras. Le quedan cinco pruebas y un total de diez mangas para correr sin presión y aspirar a ganar cuantas más carreras mejor. Debe ser su pretemporada de cara a la próxima temporada, en la que querrá recuperar un trono perdido hace unos meses.

Es el reto más complicado de un piloto que fue batido por medio punto por Biaggi en 2012 y por 3 con Guintoli en 2014. En ambos casos, fueron detalles lo que decidieron el campeonato, sin que Sykes pudiera hacer algo. Ahora la situación es mucho más compleja, pues un piloto es mucho más superior al resto. Sykes es la única amenaza real a un reinado que Rea pretende perpetuar. En manos de Tom está remediarlo y devolver la emoción al Mundial de Superbikes.