Yamaha afronta un nuevo proyecto en el mundial de Superbikes. La casa de los diapasones regreso al campeonato de las motos derivadas de serie después de cinco años de ausencia. Lo hace por todo lo alto y en sus filas contará con Sylvain Guintoli y Alex Lowes. Dos pilotos que conocen muy bien el mundial. El francés fue campeón en 2014 y el británico sabe lo que es subir al podio con la siempre difícil Suzuki.

Esta misma semana, el equipo japonés presentó la nueva R1 y en el evento estuvo también presente Pol Espargaró. El español es una apuesta de Yamaha y en 2016 defenderá por tercer año consecutivo sus colores dentro del Monster Yamaha Tech 3 de MotoGP. "Me siento orgulloso de que Yamaha tenga una representación tan grande en WorldSBK. Ya era hora de que después de los grandes resultados que se están haciendo en MotoGP aplicasen la misma base en el Mundial de Superbikes", comentó Espargaró a la web del campeonato.

"Disfrutaremos de las carreras, ¡es un buen año para engancharse!"

Yamaha buscará ser competitiva desde el inicio, aunque es una incógnita el potencial que presentarán esta temporada. Cino años fuera de un campeonato son muchos y colocarse a la altura de marcas como Kawasaki, Aprilia o Ducati será una empresa complicada. "Este año va a ser como David contra Goliat. Empiezan de cero, pero la base es muy buena y los dos pilotos tienen experiencia y muchas ganas, van a poder con todo. Ya veremos, pero creo que disfrutaremos de las carreras, ¡es un buen año para engancharse!", dijo.

Pol Espargaró es uno de los pilotos que ha probado la R1. Lo hizo el año pasado en las 8 Horas de Suzuka que ganó junto a Bradley Smith y Nakasuga. El de Granollers, tras su experiencia, confía plenamente en sus compañeros de marca: "Tuve la gran suerte de probar la nueva R1 en Suzuka -digo la gran suerte porque la moto es una pasada-  y creo que el rendimiento que van a tener este año será muy bueno, debería serlo. Es una moto muy competitiva, desde su inicio; evidentemente los pilotos y el equipo tienen que darle su punto, pero empiezan con una base muy buena y estoy seguro de que los resultados van a ser geniales".

Que el proyecto de Yamaha en Superbikes sea un éxito lo dirá al tiempo. Ahora es turno de poner la moto en la pista, corregir los puntos débiles y afianzar los fuertes. Estas próximas semanas habrá test, tanto privados como oficiales para los equipos de Superbikes, puesto que en solo un mes arranca un nuevo campeonato con las carrera de Phillip Island.