Jonathan Rea sigue siendo el rey. Después de vivir cómo la Superpole se le escapaba sobre la bocina, ha podido redimirse y ganar la primera carrera del fin de semana en el circuito de Misano-Marco Simoncelli. Tom Sykes, su compañero de equipo, se tuvo que conformar con la segunda posición después de aguantarle el ritmo durante las 21 vueltas sin poder conseguir adelantarle.
El tercer clasificado, el holandés Van Der Mark, tuvo una carrera tranquila puesto que su compañero de equipo, el americano Nicky Hayden, se iba a la grava cuando le disputaba la posición.
La carrera se decidió desde los inicios. Ya en la salida, Jonathan Rea tuvo un papel estelar. Tras el apagón de los semáforos, el vigente campeón del mundo estuvo más hábil y logro adelantar a Sykes. La Kawasaki número 1 de la parrilla no dejaría ya esa posición en toda la manga.
A su vez, la otra moto de la marca de Kobe se posicionó justo detrás y, por momentos, se le vio bastante cómodo en la segunda posición. Mientras que el norirlandés era capaz de abrir un hueco en los primeros sectores, el inglés buscaba adelantarle en la segunda mitad del circuito. Las diferencias eran muy pequeñas entre ambos pilotos. Al final de la carrera Sykes volvió a intentarlo pero su compañero cerró todas las puertas, firmando así una actuación impresionante.
Davies, en modo remontada
La cara más positiva de esta manga ha sido la Chaz Davies. El británico logró encontrar su puesta a punto de su Ducati para remontar hasta la cuarta posición. Tras una decepcionante novena posición en la Superpole, que dejó en evidencia el trabajo de la estructura oficial de la marca italiana, el número 7 de la parrilla de Superbikes se puso en modo remontada. Así, desde los primeros compases comenzó a llevar un ritmo mucho más alto que sus competidores. De esta forma, Reiterberger, Forés y Torres se vieron sobrepasados.
A falta de cinco vueltas, Davies estaba cuarto y llevaba un buen ritmo. No obstante, los neumáticos estaban desgastados, fruto de la remontada, y la distancia entre él y el podio, representado en Van Der Mark, era demasiado grande, alrededor de cinco segundos, por lo que se tuvo que conformar con la cuarta posición.
Su compañero de equipo, Davide Giugliano, sigue llevando un fin de semana con las caídas como estrella invitada. Ya en la Superpole perdió la posibilidad de tener una buena actuación por una caída y, en carrera, se fue al suelo cuando se encontraba luchando por el podio. El mismo camino siguió Nicky Hayden, que se caía en la misma vuelta, dejando solo a Van Der Mark.
Los españoles, cara y cruz
Entre los pilotos españoles se observan dos realidades distintas. Por un lado se encuentran Jordi Torres y Román Ramos. El de Ducati consiguió firmar una digna novena posición mientras que, el de BMW ha conseguido acabar con los problemas electrónicos que le privaron de hacer una buena actuación en la Superpole. En la carrera pudo remontar y ponerse en el tercer grupo de carrera.
Las caídas le auparon hasta la cuarta posición, no obstante, no pudo hacer frente al ritmo de Davies y se tuvo que conformar con la quinta plaza. Peor resultado tuvo su compañero de grupo, Xavi Forés. El español fue la parte negativa de la carrera. Tras brillar con luz propia en la clasificación, no pudo acabar las carrera y tuvo que retirarse cuando iba sexto.
Para bien o para mal, mañana tendrán que volver a salir a pista y correr la segunda manga.