La Kawasaki número 66 de Tom Sykes deberá estar en lo más alto del podio si quiere seguir recortando distancias a su compañero de equipo, Jonathan Rea. El norirlandés se está mostrando imparable durante una temporada en la que no se ha bajado del podio. A pesar de ello, el inglés ha conseguido cuatro victorias y se ha subido al podio en siete ocasiones, por lo que seguro que intentará reducir la distancia con su compañero de equipo.

El escenario para hacer más pequeñas las diferencias no es otro que el mítico circuito de Laguna Seca. 3.602 metros entre los que brilla el célebre "Sacacorchos", la curva número 8, caracterizada por su fuerte pendiente de bajada, que la convierte en un giro ciego donde los pilotos deben mostrar todas sus habilidades técnicas. Sobre esta curva, Sykes ha asegurado que es increíble, ya que “cuando miras hacia atrás, la pista parece que está a distancia”.

Esta curva aportará una dosis extra de emoción en un fin de semana donde el show fuera de la pista competirá con las carreras que se vivirán en el asfalto. En este circuito,  Sykes ya sabe lo que es ganar, lo ha conseguido dos veces. La primera, en 2013 y la segunda en 2014, una ventaja con respecto a su principal rival, que no ha ganado en el circuito americano.

Antes de subirse a la moto, Sykes ha reconocido que hicieron avances en su Ninja en los últimos ensayos, celebrados en el circuito de Misano, donde recibió un nuevo paquete competitivo para su máquina y valoraron positivamente los nuevos Pirelli.

Al ser preguntado sobre el fin de semana de carreras, el de Kawasaki ha reconocido que está “deseando correr” en el circuito californiano, un asfalto en el que tiene buenas sensaciones ya que “hemos tenido muchos éxitos allí en el pasado y me encanta la pista”, ha sentenciado Sykes. 

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