El Mundial de Superbikes llega a su fase terminal y, con ello, comienza la cuenta atrás de Jonathan Rea para coronarse como campeón por segundo año consecutivo, algo que nadie logra en la categoría desde Carl Fogarty en 1999. En su hoja de ruta, la primera cita es esta semana, en el inédito circuito alemán de Lausitzring, en el que tanto él como otros pilotos importantes del Mundial pudieron probar sus monturas en el mes de julio.

"Estuve en Lausitzring hace poco con la Ninja ZX-10R", comenta Rea en el comunicado oficial de su equipo, previo a la décima cita del calendario. "Fue importante probar la moto en un circuito nuevo como este. Nuestros rivales también lo hicieron así que no nos podíamos quedar atrás", asegura el piloto de la Isla de Man, que cuenta con una ventaja de 46 puntos sobre Tom Sykes en la general del campeonato.

Además, el vigente campeón relata cómo ha sido este inusual periodo tan largo de vacaciones -más de dos meses han transcurrido desde la última carrera, en Laguna Seca-: "Ha sido un parón muy largo. En las primeras semanas estuve divirtiéndome en casa y después de ello tuve que ponerme a trabajar para llegar en óptimas condiciones al final de la temporada. He puesto mucho esfuerzo en el gimnasio, pilotando motocross y haciendo ciclismo".

"Las últimas cuatro rondas vienen muy seguidas y es importante coger una buena dinámica. Personalmente, veo estas cuatro carreras como un bloque y no por separado", admite Rea, que quizás deba sufrir algo más que en 2015 para obtener el título. "El objetivo en Alemania será incrementar la ventaja en el campeonato en la medida que sea posible", comenta el vigente campeón de la categoría.