No ha sido un año fácil para Yamaha en el Mundial de Superbikes. Volvían a la competición tras cuatro años alejados de este nicho de carreras, con una pareja de pilotos atractiva -un ex campeón y una de las mayores promesas de la parrilla-, pero el resultado no ha podido ser peor: quintos en el Mundial de marcas y con el tercer puesto de Guintoli en la primera manga de Losail como único podio en todo el curso.

Su director deportivo, Paul Denning, un hombre con mucha experiencia tanto en el mundo de SBK como en MotoGP, ha hablado recientemente en una entrevista sobre el balance del año y las expectativas de cara a 2017, con la pretemporada comenzando esta misma semana. "El año ha supuesto un reto en algunos aspectos, hemos sufrido con algunas desafortunadas lesiones de los pilotos, que han frenado nuestro progreso", comenta el británico, en referencia a la mala suerte seguida tanto por Lowes como por Guintoli.

Y es que las lesiones de ambos pilotos han privado al equipo japonés de tener una continuidad en la evolución de la moto, siendo pco frecuente ver a los dos pilotos en la moto el mismo fin de semana. "Cuando la moto comenzaba a progresar bastante, en el primer tercio de la temporada, Sylvain resultó gravemente herido y Alex se rompió la clavícula y no tuvimos el ritmo para construir el proyecto", comenta Denning, que también añade, de forma sincera: "Esperábamos mejores resultados, eso está claro, pero ahora el nivel en el campeonato, especialmente entre los tres mejores pilotos, es el mismo nivel de MotoGP".

Cinco años sin competir son demasiados

Denning intenta justificar esta decepción con el tiempo que ha pasado desde que Yamaha dejó el Mundial, en 2011: "Nuestra última referencia era de una estructura totalmente de fábrica, una moto desarrollada en Japón y un equipo estable con dos buenos pilotos", comenta el británico, que considera clave este tiempo 'perdido': "Cinco años es mucho tiempo, porque la estructura desaparece y todos evolucionan mucho excepto nosotros".

"Si nos fijamos en la forma en que Kawasaki y Ducati se han desarrollado en SBK, especialmente Ducati, nadie imaginaba hace tres años que Davies sería capaz de ganar once carreras en un año", asegura Denning. "La continuidad de este proyecto, el de Ducati, con el mismo piloto, los mismos ingenieros y la misma estructura han hecho psible este paso adelante", comenta, en busca de una similitud. "Nuestra moto no está, por suerte, igual que hace tres años, así que podemos alcanzar ese nivel un poco más rápido de lo que lo han hecho ellos y comenzar a desafiar a Kawasaki y Ducati", sueña el director de Yamaha.

Cautela ante los objetivos de 2017

Para 2017, además, contará con la incorporación de Van der Mark, que será compañero de Lowes y formará una de las parejas más jóvenes del campeonato: "Esperamos 2017 con mucho optimismo, pero el optimismo está contenido con el realismo de lo duro que es el campeonato y por el intenso trabajo que tenemos que hacer para llegar al nivel más alto", asegura el británico, que está dispuesto a ponerse manos a la obra desde esta semana para hacer de la R1 una moto ganadora.

Ante la marca de un objetivo, Denning se muestra cauto: "Nos gustaría ver las R1 de Michael y Alex pelear regularmente con el grupo de los seis primeros y empujando por el podio desde el comienzo de la próxima temporada y que ambos peleen para estar entre los seis primeros del campeonato", lejos de aspirar, ya en 2017, a ganar el título. "Puede que no parezca un objetivo muy emocionante, pero tenemos que basar nuestras metas a partir de donde estamos ahora y eso representaría un importante paso adelante en términos de rendimiento y consistencia", concluye Denning.