Se acabó la espera. Ya han pasado casi cuatro meses desde que Jonathan Rea se coronase campeón en el circuito qatarí de Losail, consiguiendo algo que nadie en este siglo había logrado: ganar dos Mundiales seguidos. Pero ahora todo empieza de cero. Hasta siete marcas -Kawasaki, Ducati, Honda, Yamaha, Aprilia, BMW y MV Agusta- lucharán por un cetro que pertenece, durante el último lustro, a los hombres de verde.
Será un año de ciertos de cambios. De nuevo. Tras instaurar un sistema de dos días de carreras, la organización del campeonato apuesta por una segunda manga, la del domingo, de parrilla invertida, en el que los miembros del podio saldrán desde la tercera línea de la parrilla de salida. Una decisión innovadora pero que no ha gustado a los pilotos punteros de la categoría.
Es una temporada marcada por el enorme reto de Jonathan Rea: si consigue de nuevo el título, será el primer hombre en la historia en lograr tres de forma consecutiva. Tom Sykes, compañero de Rea, y Chaz Davies, el hombre más en forma en el último tercio de 2016, volverán a ser sus dos quebraderos de cabeza. Además, regresa Melandri al campeonato, mientras que los proyectos de Honda y Yamaha esperan seguir creciendo con dos alineaciones de pilotos interesantes.
¿Y los españoles? A priori, no cuentan con motos que les permitan luchar por el campeonato, pero sí por dar algún susto a los grandes de vez en cuando. Jordi Torres continúa en BMW, buscando llevar a la marca alemana hacia los puestos de cabeza; Xavi Forés persigue su primer triunfo con la Ducati privada; y Román Ramos espera progresar con una Kawasaki no oficial que no le permite demasiados lujos.