El festival barcelonés Primavera Sound cerró ayer sus puertas de la que fuese la 15ª edición del certamen, que contó con una asitencia media de 50.000 personas por día y con la participación de más de 217 bandas nacionales e internacionales, que un año más demostraron el gran poder del festival.
Las más de 217 bandas participantes lograron congregar cerca de 200.000 asistentes al evento musical
Una de las citas más célebres de la indústria musical internacional arrancaba el miércoles en el Parc del Fórum de Barcelona con una jornada gratuita en la que actuaron Orchestral Manoeuvres in the Dark (OMD), precedidos de Las Ruinas, Panama, Christina Rosenvinge, Cinerama y Albert Hammond Jr. Una muy buena manera de calentar motores para lo que se aproximaba.
James Blake, Black Keys, Alt-J, Childhood, Jungle y The Strokes, fueron las bandas más aclamadas del evento, que se encargaron de revolucionar el recinto catalán durante estos cuatro días en los que no faltó la buena música ni las ganas de que se detuviera el tiempo.
El indie-rock protagonizado por Interpol o el rock-punk de la mano de los emblemáticos The Strokes, marcaron el punto y final al certamen la pasada noche, con un público heterogéneo y multitudinario que no dejaba de bailar y tararear las letras de 'Someday', 'Reptilia', 'Under Cover Of Darkness' o 'One Way Trigger', temas de la banda de Julián Casablancas, que a apesar de iniciar su actuación con diversos problemas vocales, el compositor estadounidense supo materializar la actuación con un público a sus pies.
En el escenario de enfrente se encontraba Paul Banks .junto a sus compañeros de la banda Interpol, que lograron cerrar bocas y cosechar un gran éxito entre el público asistente, al que demostraron que todavía tienen mucho que ofrecer sobre el escenario.
El festival Primavera Sound nació en el Pueblo Español de Barcelona en la primavera de 2001 como una fiesta de un sola noche, dirigida por "tres flipados de la música sin dinero para hacerlo", afirmó uno de los responsables del certamen en una entrevista ofrecida a El País.
“Nos decían que un festival sin camping jamás funcionaría, pero nosotros odiábamos el camping”
“Nos decían que un festival sin camping jamás funcionaría, pero nosotros odiábamos el camping” confesó uno de los fundadores al mismo periódico, ya que el certamen acoge año tras año diez escenarios cuya distancia de punta a punta alcanza los dos quilómetros.
Después de quince años, la cita musical se ha convertido en uno de los diez festivales de música más internacionales del mundo, siendo el número uno en España.
