Los 42,2 kilómetros de aguas abiertas que unen las ciudades de Colonia y Punta Lara fueron el escenario en el que esta semana, el nadador argentino Damián Blaum, batió uno de los mayores récords hasta ahora registrados, 9 horas y 6 minutos.  

A la mañana temprano comenzó Blaum a gestar su hazaña en la ciudad uruguaya de Colonia, llegando hacia la tarde de ese mismo día a las costas de Punta Lara; mejorándo considerablemente la marca que había hasta ahora registrada de 10 horas. 

Sin embargo, el nadador no tuvo un viaje nada sencillo ya que la burocracia se metió en el camino ya que, a principios de semana pensaba conseguirlo, pero a las 4 horas de comenzar, debió de salir del agua por un problema con los papeles.  Finalmente, el sábado, con todos los papeles bien firmados y en regla, consiguió terminar el recorrido.

Blaum, según relata a los medios de comunicación que le esperaban a su llegada, representa a River y ha admitido que no es consciente todavía de lo que ha hecho, que está empezando a darse cuenta ahora, no mientras lo hacía.

Por otra parte, cabe hablar de quién ha sido observador en esta historia, el Colegio de Árbitros de Argentina, con el juez Pablo Cosso a la cabeza ha sido el responsable de fiscalizar la obra de Blaum.  

La familia de Blaum también ha sido una pieza clave en todo esto.  Su mujer y su hija, Esther y Gala ha estado al lado del nadador esas 9 horas y 6 minutos.  Registro de ello lo tenemos en la fotografía que ha resultado del momento del abrazo final entre los tres, con el triunfo en su cuerpo, queda para la historia la gran aventura de este nadador que, tras años de intentos y preparación, ha conseguido hacerse con el premio que tanto deseaba.