Después de varias semanas de rumores, el pasado 8 de marzo Calvin Johnson, receptor de los Detroit Lions anunció su retirada mediante un comunicado hecho público por el equipo. En el mismo, Johnson aducía motivos personales para esta decisión y desde luego que deben serlo, porque la calidad del juego de Megatron no parece haber descendido en la últimas temporadas.

Nacido hace 30 años en el estado de Georgia, ya desde el instituto su habilidades como receptor fueron destacables, siendo uno de los prospectos, jugadores de instituto con posibilidades de ser becados por las universidades para jugar en sus equipos deportivos, mejor valorados de su promoción. Finalmente seria en el Georgia Institute of Technology, conocida como Georgia Tech, donde pasaría sus años universitarios y empezaría a ser reconocido con varios premios, el más importante de todos el de Jugador Universitario del año 2006. Ese mismo año también conseguiría los trofeos Fred Biletnikoff y Paul Warfield como mejor receptor universitario y estar en la lista de finalistas del Heisman, que finalmente ganaría Troy Smith, quarterback de Ohio State.

Su carrera en la NFL comenzó al ser escogido en la segunda posición del Draft del 2007 por los Detroit Lions, equipo en el que ha desarrollado toda su carrera profesional. Durante sus nueve temporada con los Lions ha sido nombrado Pro Bowler en 6 ocasiones, tiene en su posesión el récord de la franquicia en recepciones, 731 recepciones para 11,619 yardas y 83 touchdowns. También tiene el record de la Liga en yardas de recepción con 1.964 yardas, marca que estableció en el 2012 y la segunda mejor marca de yardas de recepción en un partido, con 329.

Pese a todos estos números dignos de cualquier superestrella de la Liga, los Lions nunca han sido un equipo con potencial para alzar el Lombardi y durante estos nueve años los de Detroit solo han alcanzado la postemporada en dos ocasiones, una en 2011 y otra en 2014, a lo que hay que sumar la larga lista de lesiones mas o menos impotantes que Johnson ha sufrido durante estos años. Juntado todas estas circunstancias, son muchos los que opinan que la desmotivación ante la imposibilidad de ganar un titulo, tampoco lo logró con Georgia Tech, han sido un factor importante a la hora de anunciar su retirada.

No se puede negar el gran impacto individual que Megatron ha reportado a los Lions en particular y a la Liga en general, pero la ausencia de títulos en su palmarés, consecuencia de la falta de un quarterback realmente competente y un mejor equipo a su alrededor, así como de una carrera no demasiado larga, pueden, en el futuro, marcar la decisión su inclusión en el Salón de la Fama de Canton.

Con su retirada, los aficionados a la NFL perdemos uno de los jugadores más destacados y espectaculares de los últimos años y que merecía, sin duda, una carrera mas brillante de lo que muestra su currículum.