Ryan Fitzpatrick realizó el año pasado la que fuera, muy probablemente, su mejor temporada como jugador de la NFL. Acabó con 3.905 yardas de pase para 31 touchdowns y 15 intercepciones, añadiendo 270 yardas de carrera para dos touchdowns con una media de 4.5 yardas por carrera; su ratio de QB final fue de 88.0. Lo más importante probablemente sea que, sin mirar las estadísticas que no son malas por otra parte, podríamos decir que la temporada de Fitzpatrick fue bastante buena atendiendo solo a las sensaciones. Su sinergia con el cuerpo de receptores, sobre todo con Brandon Marshall y Eric Decker y cómo dirigió al equipo sobre el campo han sido sus baluartes a la hora de negociar la renovación. Es ahí donde entró en conflicto con la directiva de los Jets que le ofreció menos de lo que el esperaba, viendo lo que había disponible, lo que se había pagado por jugadores de un nivel similar o peor al suyo. Los Jets siguen buscando un quaterback. De hecho sus dos receptores estrellas, ya mencionados, han reclamado a la directiva mediante un vídeo que les consigan un pasador de calidad ya que, además, la relación entre estos y Fitzpatrick era bastante buena. Varios medios americanos han especulado sobre un posible traspaso de los Jets para conseguir algunos de los jóvenes quaterbacks que se lanzan al draft, Jared Goff, Paxton Lynch, Carson Wentz...

La salida al mercado de Brian Hoyer, que jugó el año pasado un total de 11 partidos, nueve como titular, para completar 2.606 yardas de pase, 19 touchdowns y siete intercepciones para un ratio de 91.4 y lo más importante, dando la sensación de que con el sobre el campo su equipo era mejor que con cualquier otro quaterback del equipo, supone un quebradero de cabeza para el bueno de "Fitzmagic" como le denominan algunos aficionados de los Jets, ante la falta de un pasador de su nivel en los últimos años de la franquicia.

Cierto es que hay varios equipos a la busca de un QB que pueda pelear el puesto de titular; los Broncos, los 49ers , los Rams, que lo conseguirán vía draft, y obviamente los propios Jets, que ven en Hoyer una opción válida. Pero existen más opciones en el mercado, aunque bastante menos fiables como Colin Kaepernick.

A estas alturas no sería prudente para ninguno de estos quaterbacks enrolarse en un equipo, pues es cuando menos dinero van a conseguir. Si Fitzpatrick decidiera en este momento firmar se verían seriamente rebajadas sus pretensiones iniciales conforme a lo económico. Pasado el draft darán comienzo los trainings camps en los que veremos el rendimiento de los picks, esto puede ser un arma de doble filo puesto que si rinden deberían rebajararse aún más. Mientras tanto, están al acecho de algún equipo desesperado lampante por un pasador experimentado que dirija su equipo para hacer una temporada digna. Fitzpatrick está espectante, mordiéndose las uñas.