Sabíamos que Goodell cobraba por su trabajo como comisionado, pero lo que muchos desconocían es que estos también gozan de un contrato como los propios jugadores de la liga. Pues bien, la cara más visible de a organización,  podría extender por cinco años  su contrato con la NFL.

Hasta 2.024, así  lo han decidido los dueños de los 32 equipos que conforman la liga de fútbol americano que habrán tomado su decisión en base a los buenos números registrados durante su "mandato". Los ingresos anuales de la liga se han triplicado prácticamente desde que accediera al cargo en 2.006 mientras que, según la revista financiera Forbes, el valor de las franquicias se ha duplicado (sin contar los nuevos estadios de los Falcons y los Vikings).

No obstante, Roger Goodell no sólo ha influido en el valor de la NFL, también ha cambiado ciertos aspectos del juego. Asimismo, durante estos diez años ha recibido críticas muy duras por su mala gestión ante algunos casos y jugadores-efectivamente, aquí entraría su caza de brujas contra los Patriots- algo que deja claro, que es muy diferente a sus predecesores Tagliabue o Rozelle.

Estas son las cinco maneras en las que la NFL ha cambiado con el mandato de Roger Goodell:

Más partidos

Gracias a Goodell y su visión empresarial, muchas de las decisiones tomadas por la liga han ido orientadas a aumentar la bolsa de los ingresos anuales. Para ello, se ha aumentado  el número de partidos en Londres hasta los cuatro  lo que supone no solo dinero, sino también promocionar aún mas este deporte.

Además, y siguiendo con el plan de aumentar la visibilidad de la NFL, se jugara este año un partido en la ciudad de Méjico (del cual ya no quedan entradas), y se especula que habrá encuentros en el futuro en  Brasil, Alemania o China.

Y no queda ahí,  sino que también le debemos el Thursday Night Football (TNF), algo que a día de hoy sería impensable quitar si tenemos en cuenta los ingresos que genera con las cadenas de televisión, además, sin el TNF no podríamos ver las equipaciones tan distinguidas del Color Rush.

Contusiones

A pesar de la mala imagen que pueda gozar la NFL con las contusiones, algo a lo que Goodell contribuyó, no fue hasta tres años después, en 2.009 y tras la audiencia en el congreso que la NFL habilitó varios protocolos a la hora de diagnosticar y tratar las contusiones. Además se han ido implementando y barajando más leyes que minimicen el riesgo de sufrir daños en la cabeza, algo muy positivo para la salud de los jugadores y de la propia NFL.

Castigos disciplinarios

Bajo el mandato de Roger Goodell, la NFL ha sido más dura con las sanciones y ha alargado las suspensiones, con el objetivo de implementar una cierta disciplina a sus jugadores (algo similar a lo ocurrido con David Stern, comisionado de la NBA).

Es en este apartado donde más críticas ha recibido, la manera en la que ha ido gestionando ciertos escándalos- Spygate, Deflategate y Bountygate- han dejado mucho que desear. Y hablamos de escándalos porque en eso se han convertido, cuando realmente deberíamos hablar de  dos procedimientos y un mero rumor.

Debe ser trabajo de un tercero quien arbitre en estas cuestiones disciplinarias, algo a lo que Goodell se resiste acceder y que hasta entonces seguirá participando activamente en las investigaciones. Es evidente que esta cuestión es la que menos han tenido en cuenta los dueños de los equipos a la hora de extender su contrato. Pero, ¿Perjudica esto a la NFL? No lo sabemos, de momento, habrá que ver como maneja el caso del racismo y la negativa de algunos jugadores a levantarse ante el himno.

Un buen legado

Roger Goodell es un hombre con una visión única de lo que es y de lo que debería ser la NFL. Es consciente de que sus decisiones conllevan una serie de seguidores pero también detractores. Sabe que su trabajo va más allá que el de generar ingresos a la liga, también es el de asegurarse de que los equipos, los jugadores y hasta los fans sigan las reglas. No obstante, las investigaciones eternas y altamente costosas junto con  la implantación de ciertas leyes no benefician en nada a este deporte. Menos mal que Goodell es un comisionado que admite sus errores, al menos alguno de ellos, y sabe rectificar (como con las reglas sobre la celebración de touchdowns).

Qué esperar

Con esta extensión de cinco años aún nos quedará por ver muchos cambios durante su mandato. Quien sabe, lo próximo quizás sea reducir el número de partidos de pretemporada de cinco a tres (sobretodo si la calidad de estos partidos sigue siendo tan nefasta como hasta ahora), tal y como llevan pidiendo numerosos equipos.  Pero conociendo la naturaleza de Goodell- empresario más que amante de este deporte- quizás vuelvan los seis partidos  de pretemporada como en los setenta.  Sea lo que sea, los números están ahí y eso lo avala a la hora de tomar cualquier decisión, lo que ayuda a que continúe dando forma a su legado.