Muy malas noticias para los Packers. Aaron Rodgers salió lesionado en el primer cuarto del partido ante los Vikings, generando muchas hipótesis acerca de cual podía llegar a ser su lesión.

El golpe se produce promediando los primeros quince minutos de juego. En una jugada en la que la bolsa de protección se rompe, Rodgers escapa hacía su lado derecho. Ahí es cuando el ex QB de la Universidad de California intenta un pase a su ala cerrada Martellus Bennett, siendo golpeado por Anthony Barr mientras soltaba el ovoide. El golpe del linebacker de Minnesota es totalmente legal, el problema es la caída, porque el mariscal de campo de Green Bay cae sobre su hombro de lanzamiento -el derecho- y termina siendo retirado del campo primero con ayuda de los médicos, y después con el carro de emergencia.

Finalmente se confirmó que Rodgers se quebró la clavícula derecha. Si bien no se sabe todavía si el capitán de la ofensiva del equipo conducido por Mike McCarthy, es muy probable que el jugador no vuelva a pisar la cancha este año. Recordemos que en el año 2013, el mariscal ya había sufrido la misma lesión pero del lado izquierdo, inconveniente que le hizo perderse siete partidos.

Ha sido un día terrible en cuanto a las lesiones para los Packers, que ya tienen al menos cinco jugadores que arrancaron el partido sentados en la banca por lesión, estando el tacle Bryan Bulaga entre ellos. Por Rodgers entró a jugar el ex UCLA Brett Hundley.

Los Packers perdieron finalmente con los Vikings, y no terminaron de convencer en la ofensiva (sobre todo porque Mike McCarthy decidió no exigir a Hundley). La duda es: Con récord de cuatro ganados y dos perdidos, ¿Tiene Green Bay posibilidades de ir a playoffs sin su QB titular?

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Sobre el autor
Agustin Esposito
En Vavel desde 2016, siempre escribiendo de NFL. Fanático de Temperley y de cualquier deporte que involucre una pelota.