La NFL se ha caracterizado por ser una institución que innova en todo aspecto, tal es el caso recientemente de la implementación del Thursday Nigth Football o los juegos anuales realizados desde hace 11 años en Londres y en la Ciudad de México.
Para este año por primera ocasión, han sido cinco juegos los destinados a disputarse fuera de los Estados Unidos, hasta el momento se han realizado tres; pero la situación resulta preocupante que, de esos juegos, todos han acabado por ser palizas y pudiera perjudicar en un futuro ya que no le conviene a la NFL como empresa dar un espectáculo tan disparejo, pues se puede llegar a perder el interés tanto de los aficionados como empresarios.
Esta temporada aún no termina con la serie de juegos internacionales, ya que el próximo domingo en Londres, los Vikings se enfrentarán a los Browns y el 19 de noviembre en la cancha del Estadio Azteca en México, Raiders y Patriots medirán fuerzas.
Jaguars aplasta a Ravens
Aunque Baltimore venía de victorias consecutivas, los Jaguars los sorprendieron dejando a Flacco con tan sólo 28 yardas y les ganaron 44 por 7.
Destacando que desde el 2013, Jacksonville juega un partido anual en Londres.
Saints blanquean a Dolphins
Antes de que finalizara la primera mitad cayó el gol de campo de New Orleans, que a la postre, terminaría dominando el partido y dejando en cero a Miami.
Rams sin piedad, derrotan a Cardinals
Después de la lesión sobre Carson Palmer que lo dejó fuera del partido, Los Angeles no tuvieron piedad y dominaron en todo aspecto a Arizona para lograr la segunda blanqueada en suelo británico.
¿Cuarta paliza en serie?
El segundo mejor equipo de la conferencia Nacional, los Minnesota Vikings, estarán enfrentándose a los Cleveland Browns que no terminan por dar un buen partido que les pueda llevar a la victoria. Por lo que pinta muy probable que el próximo domingo, exista otro juego muy desequilibrado.
Aunque la última vez que se enfrentaron fue en el 2013 en Cleveland y los Browns se alzaron con la victoria 31-27
Con estos antecedentes, la NFL tendrá que analizar mejor los partidos que destina a otras sedes para enriquecer su mercado con atractivos partidos y así evitar, lo que ha sucedido esta campaña.