Jacksonville Jaguars, la subida a la cima

 

El 2017 de los Jacksonville Jaguars se puede catalogar como una subida a la cima de la AFC. Los fichajes en las dos últimas agencias libres, en las que apuntalaron la defensa a golpe de talonario, y la aparición del corredor novato Leonard Fournette ha dotado a este equipo de una consistencia que les hace pelear con los mejores de la conferencia. Se han clasificado a postemporada por primera vez desde 2007.

La defensa ha sido clave | Foto: Jacksonville Jaguars
La defensa ha sido clave | Foto: Jacksonville Jaguars

Los Jaguars enfocaron el draft en mejorar el ataque tras una agencia libre dedicada a la parcela defensiva (AJ Bouye, Malik Jackson y Calais Campbell). En la cuarta posición total seleccionaron al fortísimo corredor Leonard Fournette, de LSU, y en segunda ronda al OT Cam Robinson, de Alabama. Destaca también el receptor Dede Westbrook, de Oklahoma, elegido en cuarta ronda.

La temporada regular ha sido para ellos la consagración de un equipo que no solo puede vivir de individualidades, sino que puede actuar como conjunto. Eso ha hecho que la defensa haya terminado el año como la mejor de la NFL en puntos recibidos, yardas de pase y sacks.

La monstruosidad de defensa ha ayudado a un ataque que ha variado mucho su estilo de juego, volcado este 2017 mucho más en la carrera con Fournette que en el pase con Blake Bortles, quien, de todas maneras, ha cuajado un buen año.

Son el tercer sembrado de la Conferencia Americana y están listos para dar mucha guerra en postemporada.

 

Tennessee Titans, resultados positivos y juego decepcionante

 

Los Tennessee Titans han tenido una temporada de muchas sensaciones encontradas. Terminan el año con un buen récord de victorias y dependiendo de ellos mismos para meterse en postemporada, pero han dejado muchas dudas con su juego.

Su draft ha sido malo. Corey Davis, al que eligieron con el número 5, no ha rendido como para justificar ser seleccionado tan alto. No llega a las 400 yardas de recepción y ha decepcionado mucho, aunque puede escudarse en sus problemas de lesiones y tendrá una nueva oportunidad en 2018. Adoree’ Jackson, el otro jugador de primera ronda para los Titans, ha demostrado que es un esquinero capaz de jugar en la NFL, aunque ante grandes receptores sufre bastante.

Por su parte, Marcus Mariota ha tenido una año pésimo, superando a duras penas el 60% de pases completados y las 3000 yardas, con 12 touchdowns y 15 intercepciones. Es preocupante

el bajo nivel que ha mostrado el mariscal de tercer año.

 

A pesar de seguir vivos en la lucha por la postemporada, los Titans han jugado de manera muy inconsistente. El juego de carrera, que debería ser temible con Demarco Murray y Derrick Henry, ha sido muy irregular y no ha concretado un dominio como el que necesita esa defensa para mantener vivos los partidos.

En defensa no han jugado del todo mal, y es lo que les salva, ya que han ganado partidos con muy poca anotación y ahí la parcela defensiva sí ha sabido dar ese paso adelante para llevarse los encuentros.

 

Houston Texans, hasta que se lesionó Deshaun Watson

 

El año de los houston Texans se puede resumir en una palabra: lesiones. El descubrimiento de Deshaun Watson mejoró mucho el juego aéreo, pero su rotura de ligamentos, sumada a lesiones importantes en defensa como las de JJ Watt y Whitney Mercilus ha afectado mucho al equipo tejano.

El draft de 2017 estuvo marcado por la subida que hicieron para escoger en el número 12 al mariscal de Clemson Deshaun Watson. Además, acertaron de lleno en segunda ronda con el linebacker Zach Cunningham y el corredor D’Onta Foreman.

Sin embargo, su 2017 no resultó como prometían los primeros partidos. Watson encabezó un ataque que daba absoluto miedo, tanto por aire como por tierra. La explosión del mariscal, que rompió incluso varios récords, se frenó con su lesión en un entrenamiento a principios de noviembre. Esto frustró las aspiraciones de Houston, que vio como Tom Savage no fue capaz de dirigir el ataque con solvencia.

Deshaun Watson tiene un gran futuro | Foto: Houston Texans
Deshaun Watson tiene un gran futuro | Foto: Houston Texans

Al final de la temporada, los Texans dieron incluso signos de dejarse llevar. Un juego muy pobre en ataque que afectó a una defensa plagada de bajas.

JJ Watt lleva dos temporadas en las que casi no ha jugado debido a lesiones en la espalda y en la pierna, y eso preocupa mucho a la franquicia de Houston, ya que puede estar dando señales de que ya no será el mismo.

 

Indianapolis Colts, echando de menos a Andrew Luck

 

El 2017 de los indianapolis Colts ha sido muy complicado. Con la baja todo el año de Andrew Luck, su mariscal estrella, el equipo no ha sabido recomponerse y ha mostrado un nivel competitivo muy bajo. No ha rendido mal el mariscal que ficharon para sustituirle, Jacoby Brisset, pero se han quedado lejos de poder luchar por alcanzar la postemporada.

Su draft no fue todo lo bueno que hubieran deseado. Les cayó hasta su posición en primera ronda el safety Malik Hooker, uno de los mejores jugadores de la clase y que rindió bien hasta que se lesionó.. Sin embargo, a pesar de Quincy Wilson y el descubrimiento de Marlon Mack en el backfield, en general el rendimiento de los novatos no ha cumplido el nivel.

Frank Gore sigue haciendo historia en la NFL | Foto: Indianapolis Colts
Frank Gore sigue haciendo historia en la NFL | Foto: Indianapolis Colts

Pero el problema principal de los Colts en este 2017 ha resultado ser la lesión interminable de Andrew Luck, uno de los mariscales con más presente y futuro de la NFL. Terminó la temporada pasada tocado de su hombro derecho (el de lanzar) y no se ha recuperado en todo el 2017. La situación tomó tintes verdaderamente preocupantes cuando  Luck sfue a Europa a recuperarse y los Colts no lograban contactar con él. Finalmente, Luck ha afirmado que espera estar para la temporada que viene.

Su sustituto este año ha sido Jacoby Brisset., mariscal obtenido a pocos días de iniciar la temporada en un traspaso con los New England Patriots. Su rendimiento ha sido bueno, contando el poco periodo de adaptación que tuvo y los problemas que tenía el equipo. Hizo de TY Hilton su principal aliado en el juego aéreo, que se ratifica como el receptor más infravalorado de la liga. Por su parte, Frank Gore ha vuelto a cuajar una gran temporada, haciendo historia con otra temporada de más de mil yardas, y siendo acompañado por una sorpresa de cuarta ronda, el corredor de South Florida Marlon Mack.

Los problemas vienen en defensa. Chuck Pagano no ha sido capaz de armar una defensa consistente. Han pasado todo el año permitiendo demasiadas yardas y la lesión de Malik Hooker (jugadorazo en la posición de free safety) les hundió por completo.

Pagano es uno de los firmes candidatos a perder su trabajo en 2018. Se ha mostrado incapaz de sobreponerse a los problemas que le surgían y ha sido sobrepasado de lleno por la evolución de la NFL.