En una Superbowl con Bill Belichick es evidente que los favoritos van a ser los New England Patriots y más si llegan con un 13-3 a la Superbowl y sin muchos apuros. Por otro lado los Giants habían llegado por primera vez a los playoffs desde su enorme sorpresa en 2008 en la posiblemente mejor temporada de la carrera de Eli Manning. Con todo esto los Patriots solo estaban preocupados por la lesión de Rob Gronkowski en el tobillo mientras que los Giants esperaban un nuevo milagro pero esta vez mucho más pequeño.

El partido, al igual que en 2008, arrancó con los Giants atacando y al igual que en la primera final entre ambos, Manning consiguió dirigir a su equipo al campo de los Patriots pero en este caso dos sacks le sacaron del FG Range para demostrar el motivo de su favoritismo. Pero un Brady totalmente desesperado por la presión de los Giants lanzó un balón a la nada que fue pitado como Intentional Grounding desde su propia end zone, lo cual es por la norma general un safety, poniendo el marcador en 2-0 para los Giants.

Esto permitió a los Giants recuperar algo de ritmo a pesar de que los Patriots estaban entrando fácilmente en la línea ofensiva para el pase largo pero no así para la carrera y el pase a la flat, lo cual estaba funcionando perfectamente. New England estuvo a punto de recuperar un fumble pero una absurda penalización de doce hombres desembocó en un pase a Victor Cruz para poner el 9-0 en el marcador antes de que acabase el primer cuarto.

Evidentemente los Patriots no iban a dar el partido por perdido en los primeros instantes y Brady empezó a mover el balón con la paciencia que le caracteriza pero Jason Pierre-Paul bateó un pase que iba directamente a touchdown, provocando que los Patriots se tuviesen que conformar con un FG que puso el 9-3 arrancado el segundo cuarto. Esto no asustó a unos Giants que seguían comiendo terreno por el suelo lo cual ayudaba a pases como el de Manning a Nicks para devolver la posesión al campo de New England sin conseguir sin embargo anotar en el drive.

Jason Pierre-Paul volvió a batear un pase de Brady y los Giants provocaron un tres y fuera que hacía posible soñar con un partido tranquilo para los neoyorkinos. Pero la defensa de los Patriots no iba a permitirlo a pesar de un maravilloso drive, frenándoles antes del FG una vez más, lo cual fue respondido con un punt casi perfecto que colocó a los Patriots en su propia yarda del dos.

Brady trató de recuperar el ritmo antes de llegar al descanso y lo consiguió, llevando al equipo hasta la yarda del uno de los Giants en menos de tres minutos. Pero en ese momento Jason Pierre Paul volvió a conseguir un placaje para pérdida, lo cual no impidió a Brady conectar con Woodhead para poner el 9-10 en el marcador justo antes de llegar al descanso. Todo parecía hacer indicar que, recibiendo el balón ahora  los Patriots, podían empezar a distanciarse.

Los Giants sobreviven al asedio

Los Patriots se encontraron tras anotar con su mejor nivel y empezaron a volar sobre la defensa de los Giants en un primer drive estratosférico que permitió a Aaron Hernández anotar gracias a un pase de Brady, poniendo un 9-17 que empezaba a parecer resolutivo después de la tremenda igualdad que había habido en la anterior SB. Pero Nueva York sacó músculo con Manning dirigiendo el tráfico apoyado en la siempre peligrosa carrera y en Hakeem Nicks para anotar tres puntos que dejaban el marcador en un 12-17 favorable para el equipo de New England.

Pierre-Paul cayó y los Giants temieron por su mejor defensa pero el resto del equipo consiguió retener al ataque de los Patriots con un sack de Tuck. Un balón que casi pierde Nicks provocó el pánico pero los Giants se repusieron sin ser capaces de anotar un TD, teniendo que conformarse con otro FG que colocó el 15-17 en el emparrillado justo cuando iba a acabar el tercer cuarto.

La vuelta de Pierre-Paul dio esperanzas a los Giants a pesar de que los Patriots seguían moviendo el balón de forma segura y controlada hasta que evitando el sack Blackburn consiguió interceptar a Tom Brady en la otra punta del campo, devolviéndole la posesión a los Giants, la cual casi pierden en un fumble recuperado de milagro. Manningham estuvo a punto de recibir un balón en el que se salió dejándoles fuera del rango de FG, lo cual produjo unos comentarios de Cris Collinsworth que posteriormente serían recordados.

Los Patriots arrancaron dispuestos a comerse el reloj con pases cortos que intentaban escapar de la peligrosa presión de la línea de los Giants y carreras, lo cual hizo que poco a poco los minutos pasasen sin que Nueva York fuese capaz de frenar la hemorragia hasta que Welker (el cual estaba haciendo un partidazo) falló una recepción muy sencilla que hubiese terminado el partido de forma definitiva a falta de solo cuatro minutos para que acabase el partido.

La venganza de Manningham

Manningham recibe de forma imposible ante el banquillo Patriot. Fuente: New York Giants
Manningham recibe de forma imposible ante el banquillo Patriot. Fuente: New York Giants

Lo más elocuente fue el silencio de Collinsworth hasta ver la repetición para entender esta jugada. En el primer down del drive, insertado dentro de la yarda del dos, Manningham recibió un pase en la banda  totalmente imposible que recibió cayendo hacia fuera pero logrando mantener los dos pies dentro de una forma inverosímil. Una vez más los Giants hacían una jugada sencillamente imposible en el que podía ser el drive definitivo para el final del partido.

Con tres minutos para el final del partido los Giants se lo tomaron con cierta calma una vez asentados en el campo de los Patriots, alcanzando en el descanso de los dos minutos un primer down gracias a un gran pase a Nicks. Nicks siguió recibiendo balones y logrando primeros downs lo cual fue mal recibido por Collinsworth, el cual aseguraba que era un error y que los Giants estaban dejando demasiado tiempo en el reloj. Manning le dio el balón a Bradshaw y anotó un TD totalmente permitido por la defensa de los Patriots en una jugada muy extraña donde Hemsworth volvió a asegurar que los Giants habían cometido un gravísimo error.

Tras anotar los dos puntos el balón volvió a los Patriots con cincuenta segundos para que acabase el encuentro. La importancia de estos comentarios de Collinsworth comentados durante la crónica se mostraría ahora, cuando volvió a criticar a Tom Coughlin. Cabe recordar que estos comentarios resaltaron con su actitud siempre hostil hacía Manning y Coughlin, lo cual ya había dado espacio a comentarios sobre la profesionalidad de Collinsworth, los cuales aumentarían a lo largo de los años mientras que Al Michaels mantuvo su carácter siempre respetuoso durante toda la retransmisión

Branch estuvo a punto de recibir un pase de más de cuarenta yardas pero fue bien tocado por la defensa de los Giants, Hernandez tuvo también otro drop tras un gran partido y Tuck conectó otro sack a falta de treinta y seis segundos para que acabase el partido pero Brady logró un primer down de la nada que volvió a meter a los Patriots en el partido con treinta y dos segundos en su propia yarda del 33.

A falta de veinte segundos el balón se colocó en la yarda 44 de New England, lo cual unido a una falta de los Giants permitió que a nueve segundos el balón se posicionara en el medio del campo, Branch no consiguió recibir un balón que hubiese puesto en mejor situación de campo a los Patriots y el Hail Mary final fue tocado por muchas manos pero cayó al suelo, dándole la victoria por segunda vez a los New York Giants.

Coughlin y Manning aumentaron su leyenda en la que sería la última Super Bowl en la actualidad hasta ahora mientras que Brady y Belichick fueron derrotados por su némesis solo para volver a triunfar en múltiples ocasiones en el escenario más grande de todos.