Los Jacksonville Jaguars han anunciado la extensión del contrato del quarterback Blake Bortles hasta 2020. El salario será de 54 millones de dólares con 26 de ellos garantizados, pero puede subir hasta los 66,5 en caso de cumplir varios incentivos.

2017, el mejor año de su carrera

Antes de comenzar la temporada, los Jaguars ejercieron la opción de quinto año del contrato rookie de Bortles. De esta manera se arriesgaban a pagarle casi 20 millones cuando hasta el momento no había demostrado la seguridad necesaria en la posición más importante del equipo. Además, tras un mal entrenamiento a principios de verano, donde fue interceptado cinco veces, el entrenador Doug Marrone declaró que se había abierto una competición por el puesto de titular entre Bortles y Chad Henne. No obstante, el 26 de agosto Bortles fue nombrado titular para la temporada 2017.

El juego de los Jaguars cambió mucho con la llegada de Marrone al puesto de entrenador en jefe. El corredor Leonard Fournette fue elegido en la cuarta posición del draft, lo que viraba completamente la filosofía del equipo hacia un ataque basado en la carrera y no en el pase.

No salió mal la decisión, ya que Fournette sobrepasó las 1000 yardas y los Jaguars se clasificaron para postemporada por primera vez desde hace diez años.

Todo esto fue clave en la evolución de Bortles como pasador. Se sintió más liberado acompañado de Fournette en el backfield y superó por primera vez en su carrera el 60% de pases completados (60,2).

En playoffs, la participación de Bortles fue muy destacable. Corrió para cerca de cien yardas contra los Buffalo Bills y cuajó buenos partidos en Pittsburgh y en New England, plantando cara a estrellas de la posición como Ben Roethlisberger y Tom Brady.

Una apuesta segura

A pesar del buen año y la aparición en postemporada, Bortles sigue despertando dudas a la organización de los Jaguars. Es por eso que la extensión firmada solo asegura el primer año de contrato (2018) y permite al equipo cortarle en 2019 con un bajo impacto al espacio salarial. Esto quiere decir que los Jaguars volverán a tener la posibilidad de quedarse o no al quarterback dependiendo de la temporada que realice.

Esta es la mejor decisión que podía haber tomado el equipo de Florida, pues no solo mantiene todo el control en el futuro de Bortles, sino que además tiene la posibilidad de elegir un quarterback en el draft de este año y utilizar a Bortles de puente para que el nuevo pasador se convierta en titular en 2019.

Lo que sí está claro es que los Jaguars no han querido hipotecar su futuro con Bortles dándole un contrato de larga duración como el de Garoppolo, por ejemplo. Es por eso que quizá, los Jaguars aún no estén fuera del mercado de quarterbacks en esta offseason.