La eliminatoria llegaba a la noche del pasado viernes con un 2-1 a favor del equipo de Las Vegas, y los Winnipeg Jets iban a apostar fuerte para no volver de vacío de la ciudad del pecado y recuperar el factor campo de cara a la recta final de la serie. Por otro lado los locales, una vez más con el apoyo entusiasta de su público, tenían la oportunidad de poner muy de cara la eliminatoria.

Que los dos equipos salían a por todas quedó demostrado desde el primer disco que impactó en el hielo, juego muy físico con un predominio inicial de los Knights que se tradujo en un gol de William Karlsson en la primera superioridad de la que dispusieron. Una vez más estaban en ventaja con el partido recién comenzado.

El partido continuó con fases de dominio alterno con tiros que iban resolviendo con solvencia tanto Marc-André Fleury como Connor Hellebuyck. Hasta que mediado el segundo periodo, llegó el empate de Winnipeg, al igual que el primero en jugada de superioridad, Patrik Laine enganchaba uno de sus slap shot que no daba opción ninguna a Fleury, primer gol fuera de casa en postemporada para el finlandés. El tiempo de celebración fue muy breve, Tomas Nosek marcaba su primer gol de postemporada tras una jugada generada por un rebote de los que Hellebuyck rara vez concede, ese disco que escapó de su guante fue a parar al stick de Bellemare que desde atrás de la portería facilitó la asistencia al jugador checo.

El segundo periodo se cerró con la escasa ventaja local, así que el tercer periodo se inició con las espadas en todo lo alto. Los Jets pusieron precio a la cabeza de Fleury y salieron a arrollar a sus rivales. Minutos que transcurrían en el hielo de los Golden Knights y con paradas de Fleury, hasta que Tyler Myers conseguía llevar el empate al marcador, en una jugada que de primeras pasó inadvertida porque el disco que se coló entre las guardas de Fleury acabó incrustándose en el entramado interior de cámaras de televisión de la portería quedando oculto, pero la revisión de vídeo demostró fehacientemente el tanto.

Esta vez no hubo respuesta temprana de los locales, es más continuó el dominio visitante con los de casa confiando en el trabajo de Fleury en la portería y tratando de morder en las ocasiones que podían generar en los momentos que lograban hacerse con el disco.

Al final Winnipeg fue víctima de su entusiasmo, Dustin Byfuglien, uno de los líderes del acoso del equipo canadiense, se equivoca al lanzar un slap desde la línea azul y su disco es interceptado por Reilly Smith, que lanzado hacia la portería rival marcó el que a la postre sería el gol ganador a falta de siete minutos para el fin del tiempo reglamentario.

Los Jets necesitarán a un mejor Hellebuyck para remontar Foto Ethan Miller/Getty Images
Los Jets necesitarán a un mejor Hellebuyck para remontar Foto Ethan Miller/Getty Images

Duro golpe para los Jets, tanto la cercanía al final del tanto como la manera en la que vino, de un error propio, metió un punto de desesperación en su juego que fueron incapaces de superar, de hecho Las Vegas consiguió que no pudieran sacar a Hellebuyck de la portería para incluir un patinador extra hasta el último minuto, cosa que tampoco les sirvió de nada.

Últimos segundos de partido celebrados como una fiesta en el T-Mobile Arena, y ahora la eliminatoria vuelve a Winnipeg donde los canadienses partido a partido lucharán por remontar la eliminatoria y dejar en Las Vegas lo sucedido en Las Vegas como narra el dicho.