Una de las perlas de este draft es sin duda Patrik Laine. El finés partía por detrás de su compatriota en todas las quinielas el pasado otoño, pero su excepcional año ya no sólo lo coloca por delante sino en la disputa por ser elegido en primer lugar. A pesar tener sólo 17 años (cumplió los 18 en abril) fue pieza angular de Tappara en la consecución del título de la Liiga y uno de los jugadores clave de la selección finlandesa tanto en la World Junior Championship (menores de 20 años) como en el World Championship con el combinado finlandés, quien le abrió las puertas al tener algunos de sus jugadores importantes disputando los playoffs de la NHL

Laine tiene todos los ingredientes para ser un top scorer de la NHL en un plazo muy corto de tiempo. Cuenta con la ventaja de tener experiencia jugando contra jugadores mayores que él y más curtidos, lo que le concede una ventaja con respecto a los prospects de América del Norte. Laine es un delantero imponente, que ha sabido Laine tiene todos los ingredientes para ser un top scorer de la NHL en un plazo muy corto de tiempoaprovechar su físico para competir al más alto nivel. De cara a portería es un terror para los arqueros gracias a su extraordinaria capacidad natural para poner el disco en la red desde cualquier lugar de la zona ofensiva, tiene un disparo demoledor. Se asemeja en muchos de sus movimientos a los de Alex Ovechkin y al igual que el ruso es letal en el powerplay, algo muy valorado en la NHL. Aunque el gol es algo que va unido a Laine no es un jugador rácano y su buena visión del juego así como su gran manejo del stick le hacen ser también un gran pasador.

Otro de los puntos fuertes del finés es su gran envergadura. Con 194cm y un peso de 95kg Laine cubre el disco de maravilla que unido a su buen manejo hace que en la zona de ataque sea muy bueno en las esquinas. Aunque no es muy veloz tiene una buena zancada para su corpulencia. En el aspecto defensivo flojea un poco aunque en el último año ha mejorado bastante en ese aspecto.