Los Minnesota Wild remontaron y ganaron la pasada madrugada un partido clave en Chicago ante los Blackhawks. Con esos dos puntos, la franquicia de St. Paul mejoró su marca a 28-9-5 y consiguió la primera plaza de la división, precisamente, a costa del equipo de Illinois. Con 61 puntos, los pupilos de Bruce Boudreau son el tercer mejor clasificado de toda la liga, solo por detrás de los Washington Capitals y los Columbus Blue Jackets.

Liderando la división Central Temporada sorprendente la que están deparando los Wild. Contra pronóstico y con unas decisiones arriesgadas en el apartado de fichajes, Minnesota se ha hecho con el control de una división central con franquicias muy posicionadas, a priori, a ser de playoffs. Chicago, Nashville, St. Louis… eran los candidatos a luchar por el primer puesto aunque se ha sumado un invitado sorpresa.

Un primer mes espectacular, con 13 de 18 puntos posibles, ya hacía creer a una afición que pocas alegrías ha tenido en las últimas campañas. Sin embargo, noviembre significó un bajón considerable. Los Wild solo lograron 12 puntos de 26 en juego, descendiendo notoriamente en la tabla. En cambio, diciembre fue la llave. Una escandalosa racha de 12 partidos consecutivos sin perder y la suma de 25 puntos sobre 28, aupó al equipo a la zona puntera, de donde no se ha despegado.

Enero se antojaba muy complicado pero, por el contrario, Minnesota sigue su escalada y su tremenda racha de resultados. El pasado jueves venció a Montreal por 7-1, uno de los equipos aspirantes a llevarse el trofeo final y, en los dos últimos días, ha ganado dos partidos fuera de casa. Los síntomas son claros, la plantilla está enchufada y disparada hacia arriba.

Claves del éxito

Hay varias razones para explicar la exitosa temporada de una franquicia que aún no tiene ninguna Stanley Cup en sus vitrinas.

Devan Dubnyk. El portero de los Wild está en un estado de forma tremendo. Posee un .940 % en paradas y concede una media de 1.78 goles por partido, el segundo mejor equipo de toda la NHL en esta última estadística. No solo en la defensa se basa este equipo, sino que también ataca, y muy bien. Minnesota anota 3.18 goles por partido, la cuarta mejor marca de la liga.

Eric Staal está volviendo a jugar un gran hockey Otra clave en forma de jugador es Eric Staal, veterano de 32 años y firmando una de las mejores temporadas de toda su carrera. Está aportando casi un punto por partido y resultando decisivo en partidos determinantes.

Por tanto, la gran sensación de la temporada, los Minnesota Wild, lideran su división con dos puntos de ventaja sobre Chicago y con cuatro partidos menos, un colchón muy importante. Ahora, Bruce Bodreau manejará cuatro partidos seguidos en el Xcel Energy Center, empezando mañana frente a los New Jersey Devils y terminando el próximo domingo frente a los Nashville Predators, rivales de división.