Tres semanas después de la apertura de la agencia libre, las extensiones de contrato de los agentes libres restringidos (RFA) que están sometidas a arbitraje, van siendo examinadas para dictaminar las clausulas finales de los mismos. La cercanía de las mismas también se convierten en un arma de presión en las partes que negocian para forzar acuerdos a aquellos negociadores que puedan verse perdedores en el resultado del arbitrio. Tanto en el caso de Tatar y Detroit, como el de Arvidsson y Nashville, el acuerdo llegó con la vista de arbitraje a la vuelta de la esquina.

Tomas Tatar, de tener los días contados a ser una pieza de futuro

La negociación del jugador eslovaco de 26 años, ha seguido un proceso paralelo a la de Colton Parayko y los St. Louis Blues, una negociación enquistada y encaminada al arbitraje, con el jugador buscando una duración corta para buscar nuevos aires y mejor sueldo cuanto antes en otro equipo, y una oficina del equipo intentando ajustar el salario lo máximo posible, y que al final con el arbitraje a punto de dictaminar su decisión, acaba desbloqueándose.

Cuándo todo iba encaminado a un contrato por un año por unos 4,3 millones de dólares que significaría la despedida del jugador en 2018, se llega a un acuerdo que ha acabado satisfaciendo a las dos partes.

Cuatro años con un montante total de 21,2 millones de dólares, lo que equivale a un impacto anual de 5,3 millones contra el límite salarial de los de Detroit, y como está ocurriendo en multitud de contratos que se están firmando últimamente, con un cobro en "signing bonus" en 2020-21 en previsión de que la firma del próximo convenio colectivo entre NHL y sindicato de jugadores se complique.

Detroit que tras 26 temporadas consecutivas alcanzando los playoffs de la NHL, se ha visto este 2017 fuera de las series finales, no podía permitirse el lujo de perder aún más competitividad para el año que viene. Por su parte Tatar, expresó que su deseo principal era quedarse en Detroit, aunque en unas condiciones que no fueran un lastre para él, mostró su satisfacción por el acuerdo. 

Tras este acuerdo, Ken Holland se encuentra con el problema de estar 3 millones de dólares por encima del límite salarial y sin haber firmado todavía la continuidad de Andreas Athanasiou, va a tener entretenimiento hasta el inicio de la liga.

Arvidsson estrena estatus de jugador importante en Nashville

Viktor Arvidsson ha hecho valer su excelente temporada. Foto: Christopher Hanewinckel/USA Today Sports
Viktor Arvidsson ha hecho valer su excelente temporada. Foto: Christopher Hanewinckel/USA Today Sports

El sueco tras cumplir con su segundo año del contrato de entrada en la liga con los Predators, va a ver recompensada de manera económica su explosión de juego en esta temporada que le ha llevado al top de la delantera.

El delantero sueco de 24 años se convertía en agente libre restringido el pasado 1 de Julio. A pesar del evidente interés de los de Tennessee por seguir contando con los servicios del jugador, la resolución del acuerdo entre ambas partes se dirigía hacia la solución arbitrada, pero justo un día antes de que se celebrara dicha vista arbitral, se llegaba al acuerdo que con total seguridad acaba dejando más satisfacción para todos ante una solución impuesta.

Una extensión de 7 años por los que Arvidsson se embolsará 29,75 millones de dólares, una media anual de 4,25 millones de dólares hasta la temporada 2023-24. Un salario que no es de súper estrella, pero si de jugador importante en la NHL, acorde con el papel que le espera en el futuro del equipo de Nashville.

Con esta firma los Preds y su manager general David Poile disponen de un espacio de 14,5 millones de dólares para las firmas de los agentes libres que les quedan, Ryan Johansen y Austin Watson (cuya vista de arbitraje será este lunes 24 de Julio)